El arroyo Camarmilla forma parte del patrimonio natural e histórico de nuestra ciudad, pero su mantenimiento y conservación no ha figurado entre las prioridades de las últimas administraciones locales que han condenado el arroyo y su entorno al abandono.
Actualmente la situación se ha vuelto insostenible basura, lodos, vertidos, cauces anegados y aguas turbias son el paisaje de las riveras del Camarmilla. El daño ocasionado al entorno peligra con hacerse irreversible si no se realiza una decidida intervención de restauración ambiental de este ecosistema.
La voz de la ciudadanía representada en la Plataforma Salvemos el Camarmilla lleva años clamando contra la destrucción del entorno del arroyo. Esta plataforma está integrada por once entidades y asociaciones de vecinos que exigen la recuperación de este entorno como un valor añadido para la ciudad y una mejora para la calidad de vida de los alcalaínos.
Parece que al fin este eco de voces que ha resonado en numerosas iniciativas y manifestaciones está siendo escuchado por los políticos de nuestra ciudad. Izquierda Unida se ha sumado a las demandas de la plataforma exigiendo a Ayuntamiento que asuma sus competencias en el mantenimiento de las riveras fluviales. Asimismo en el pleno ordinario que se celebrará mañana el Partido Popular presentará una moción para acondicionar el entorno del arroyo Camarmilla.
Salvemos el Camarmilla exige la recuperación del entorno del arroyo como un valor añadido para la ciudad y una mejora de la calidad de vida de los alcalaínos
Por su parte la Plataforma Salvemos el Camarmilla sigue luchando por conseguir resultados reales que se traduzcan en la mejora de las condiciones del entorno del Camarmilla. Tras solicitar una reunión con el concejal de Medio Ambiente, Enrique Nogués han presentado al Ayuntamiento una lista de propuestas concretas sobre las que trabajar en dicho encuentro, que esperan se produzca a no más tardar.
Entre las medidas que Salvemos el Camarmilla propone para la restauración ambiental se encuentra la constitución un Consejo Local del Camarmilla, que elabore un Plan de Conservación y Mejora del arroyo. También reclaman que las instituciones asuman sus competencias. Piden al Ayuntamiento se responsabilice de la limpieza de los residuos de origen humano tanto en el cauce como en las riberas, márgenes y vega del arroyo, y a la Confederación Hidrográfica del Tajo que despliegue vigilancia y ponga solución a la mala calidad del agua y los problemas de vertidos.
Asimismo, para poner en valor este espacio natural y permitir que sea un lugar de conservación de la fauna y flora autóctonas, y de disfrute para la ciudadanía se ha propuesto el trazado de una senda paralela a arroyo, el despliegue de carteles informativos y la realización de talleres de concienciación en las aulas.