El Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares se ha convertido en uno de los cuatro centros satélites del Banco Regional de Leche Materna Aladina-MGU del Hospital 12 de Octubre. Esta incorporación hace posible la donación de leche materna en el hospital, un punto clave para las donantes del Corredor de Henares. Este banco estará situado en el área de Neonatología.
El Hospital Universitario Severo Ochoa de Leganés, el Hospital Universitario de Puerta de Hierro y el Hospital Universitario La Paz son los otros tres centros que se engloban dentro de este Banco Regional, los cuales se encuentran en la fase II con respecto a la capacidad de seleccionar donantes. Y es que para poder realizar estas donaciones es necesario llevar un estilo de vida saludable y que la lactancia sea satisfactoria, para así no causar problemas al bebé y almacenar una leche saludable.
Una ayuda para niños prematuros
El propio centro será el encargado de informar a las mujeres que quieran realizar estas donaciones para extraer la leche de forma correcta, así como los requisitos para conservar y transportar la leche. En cuanto a la conservación, es importante que se congele a -20ºC y entregarse en un plazo de 15 días. Para este transporte se repartirán recipientes de cristal estéril, así como unas etiquetas para identificar y clasificar las donaciones, además de todo el material necesario. Además, se informará sobre la adecuada higiene en el momento de la extracción de leche. Una vez depositada en el Hospital, el Banco Regional lo transportará para a los centros receptores, que actualmente son seis en total: el Hospital 12 de Octubre, La Paz, Puerta de Hierro, Clínico San Carlos, Severo Ochoa y Príncipe de Asturias.
Estas donaciones son necesarias para tratar a los niños hospitalizados, especialmente los nacidos prematuramente o con bajo peso (por debajo de los 1.5000 gramos) que no pueden ser amamantados por su madre o necesitan un suplemento. La leche humana causa menos problemas intestinales e infecciones que la tratada artificialmente, por lo que la respuesta en estos bebés suele ser satisfactoria. Además, estas alternativas están respaldadas por la Organización Mundial de la Salud, UNICEF y las Sociedades Científicas.