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Hace unos días pudimos conocer que el futuro de ALCINE estaba pendiente de un hilo. Fue la portavoz de Más Madrid la que aseguró en este medio que "nos vamos a quedar sin el festival de cine", y explicó que "la empresa que gestiona la producción, que fue la única que concursó en esa licitación, va a renunciar, no va a prorrogar su contrato". Además, Rosa Romero señaló que no le gustaría que este pilar fundamental de Alcalá de Henares se fuera de la ciudad como ya lo hizo el Festival Gigante.

Así mismo, Romero mantenía que "una de dos, o cambiamos el modelo y ALCINE vuelve a ser producido por personal del Ayuntamiento, y dotamos a ALCINE con personal para poder gestionarlo, o se aumenta la partida presupuestaria".

Ante esta noticia, el Gobierno de Alcalá salió a defender la consecución del festival. Según fuentes municipales, se está cambiando el modelo de gestión para que la empresa que viene realizando ALCINE siga haciéndolo. Así mismo, el concejal de Cultura, Santiago Alonso, en declaraciones para este medio, aseveró que la oposición "se dedica a lanzar bombas de humo", y aseguró que el festival no estaba en peligro, "nada más lejos de la realidad".

En este sentido, Alonso invitó a los partidos a ponerse a trabajar y a hacer una oposición "que aporte, que sume a nuestra ciudad", y señaló que "ALCINE no solo no corre peligro, sino que se está trabajando para potenciarlo y que esta 53.ª edición sea mucho mejor que las anteriores".