El Barrio de Espartales Norte es una zona básicamente nueva, algunos bloques de pisos de esta zona no llegan a los 10 años de antigüedad y muchos otros aún están en construcción o recientemente se ha efectuado la entrega de llaves. Por ello, ¿cómo se puede hablar ya de falta de mantenimiento?
Deterioro del pavimento, falta de cuidado de las zonas verdes, ramas de árboles... Lo cierto es que, según algunos vecinos de la zona con los que ha podido contactar Soy-de.com están hartos de reclamar al Ayuntamiento que evalúe y actúe para reparar los desperfectos del barrio. A estas afirmaciones se unen las realizadas por la formación morada, quienes mantienen que "La realidad es que pasar con un vehículo por esta zona es correr el riesgo de tener alguna avería en los bajos".
La organización de este barrio complutense se podría explicar de la siguiente manera: la calle principal que articula el resto de zonas es la Avenida Gustavo Adolfo Bécquer, que da comienzo en las instalaciones del Centro Deportivo Wanda de la ciudad, y acaba pasando el Arroyo Camarmilla, dirección Camarma de Esteruelas y A-2. La vía por la que se circula en esta zona es de doble carril en ambas direcciones, además de tener una anchura considerable, algo que parece indicar que el tráfico debería ser fluido, sin embargo, gracias a los baches y socavones que hay, parece volverse un peligro para los conductores.
Los alcalaínos y alcalaínas no tienen porqué pagar con sus impuestos la desidia municipal
En la misma línea, en el Parque de Los Espartales, "uno de los pulmones de Alcalá", predomina la "dejadez y falta de mantenimiento constante de las zonas verdes", afirma UP-IU. Unas declaraciones a las que se les unen dos vecinos de la zona, quienes han preferido no dar nombre, y señalan que "cada vez que queremos sacar al perro por este parque tenemos que andar con ojo, sobre todo en verano que se convierte en un secarral".
Teniendo en cuenta que en verano aumenta el peligro de incendios, sobre todo este año en el que las olas de calor han venido con fuerza, cabe preguntarse por qué parece que el consistorio no ha movido un dedo para salvaguardar la seguridad de sus vecinos. "Mantener los parques no se convierte en una mera cuestión estética".
Pero, suma y sigue, la misma problemática se da en la Calle Miguel Ángel Blanco, una zona que cada vez va cobrando más vida gracias al comercio. Además, se le une un detalle particular, y es que el tramo debería ser peatonal, ¿por qué? Sencillo: por la distribución que presenta, así como por los bancos que hay. Sin embargo, tiene los pivotes bajados y no hay señal de prohibición el paso de vehículos, por lo que los coches acceden, aparcan y ocupan la calle. Esto carece de sentido, ya que el hecho de que haya coches aparcados no es compatible con que sea una calle peatonal de disfrute vecinal, por lo que los alcorques cercanos se encuentran vacíos o tapiados, las “zonas verdes” están por plantar y se muestran áridas y con restos de heces de animales.
Así, cada vez son más los barrios que se unen a las quejas y reclaman al Ayuntamiento complutense medidas para mejorar sus zonas, y afirman sentirse abandonados por un consistorio que parece que solo le preocupa el envoltorio. "Los alcalaínos y alcalaínas no tienen porqué pagar con sus impuestos la desidia municipal", mantiene UP-IU.
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