Durante la carrera, los españoles fueron muy superiores a sus rivales, llegando primeros al relevo de la penúltima posta. Superada la mitad de la competición, nuestro conjunto perdía la cabeza, colocándose, incluso, en el cuarto lugar, por detrás de los italianos, los ucranianos y los polacos.
El alcalaíno sacó toda su velocidad y la puso a disposición de nuestro combinado, remontando de una forma casi milagrosa
Pero, en ese momento, llegó el turno de nuestro Iván Alba. El alcalaíno sacó toda su velocidad y la puso a disposición de nuestro combinado, remontando de una forma casi milagrosa y firmando el segundo lugar y la medalla de plata para nuestro país.
Además de la medalla conseguida, nuestros atletas lograron un registro de 1:53.62, suponiendo la mejor marca juvenil y mejorando la plusmarca española, que estaba en 1:54.56 del Mundial Juvenil de Debrecen en 2001.
¡Enhorabuena, Iván!