La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el primer ‘Biomódulo’ para la investigación de enfermedades agrícolas, con la finalidad de mejorar los cultivos más representativos de la región a través del control de microorganismos que puedan afectarlos. Así lo ha anunciado hoy la consejera de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad, Paloma Martín, quien ha inaugurado este espacio junto con los investigadores del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA).
Se trata del primer Laboratorio Modular de contención biológica de Alta Seguridad de la Comunidad de Madrid, y el único de estas características en España que cuenta con una cámara de cultivo. Estará dedicado exclusivamente a analizar las 8.000 plantaciones agrícolas de la región, con el fin de aumentar la competitividad y la calidad de los productos vegetales de Madrid.
Martín ha destacado que “es una clara apuesta de la Comunidad de Madrid por la innovación que permitirá investigar, combatir y detectar enfermedades que afectan a los cultivos agrícolas y a la flora del medio natural. Será el único laboratorio en España dedicado a la investigación de microorganismos vegetales y a desarrollar modificaciones genéticas en las plantas para hacerlas más resistentes a patologías.”. A su juicio, esta experimentación no sería posible “sin un laboratorio de estas características”.
La consejera ha explicado que “impulsar la I+D+i es un eje esencial de nuestras políticas, también de las agrarias y medioambientales, y que están presentes dentro del Plan Terra, el Plan de Acción para la Agricultura que presentó la presidenta Díaz Ayuso el viernes pasado y que nos va a permitir fomentar una agricultura más competitiva y sostenible”.
La Comunidad de Madrid da, de este modo, un gran salto cualitativo en la protección del medio ambiente, favoreciendo la innovación en la lucha contra las enfermedades y plagas que más pueden perjudicar a cultivos de nuestra agricultura tan importantes como el olivo, la vid, el almendro, el pistacho, la cebolla o la patata.
Este laboratorio para el tratamiento de cultivos está situado en la finca El Encín de Alcalá de Henares, dirigido por el IMIDRA, donde sus científicos del área de Sanidad Vegetal del IMIDRA, a través de sus investigaciones, pueden detectar gérmenes, bacterias o virus, entre otras patologías.
El ‘Biomódulo’, además, es de los pocos de estas características que cuenta con una cámara de cultivo, lo que permitirá a los investigadores agilizar su trabajo y confirmar los resultados de sus análisis in situ. Todo ello destinado a prevenir enfermedades, potenciar los productos del campo madrileño y ayudar a los 7.800 agricultores a actuar sobre sus cultivos en el menor tiempo posible.
Este Laboratorio Modular de Contención Biológica BSL2+, que permite la protección total del entorno y de los trabajadores, es una clara apuesta del Gobierno regional por mejorar la situación de los 7.800 agricultores madrileños y, por ello, sigue desarrollando medidas eficaces e invirtiendo en líneas de trabajo decisivas. De hecho, para conseguir el nivel de seguridad 2+ con el que ahora cuenta, el Ejecutivo autonómico ha invertido 400.000 euros, y sigue trabajando para obtener, en breve, el nivel 3, el máximo para este tipo de centros.
El ‘Biomódulo’ cuenta con una superficie de 52 metros cuadrados en la que se integran, además de la citada cámara de cultivo, una sala de máquinas, un distribuidor, una sala de autoclave, un vestuario y un laboratorio. En él trabajará un equipo de cinco investigadores dirigido por una de las patólogas vegetales más prestigiosas del país, Belén Álvarez, una clara apuesta de la Comunidad de Madrid por el más alto nivel profesional para el campo madrileño.