Alcalá de Henares ya ha dado el primer paso (oficial) para organizar su territorio de una manera más adecuada a su realidad actual. Lo hizo en el pasado pleno extraordinario, que aprobó, casi por unanimidad, la exposición pública del avance del Plan General de Ordenación Urbana.
Este trámite es necesario para que el documento, redactado después de casi 30 años del último publicado - trabajado por las diferentes corporaciones a lo largo de los años y con la participación de la mayoría de las entidades locales durante la pasada legislatura - obtenga, primero, las alegaciones de particulares y entidades y después reciba los informes de la Comunidad de Madrid que permitirán llevarlo al Pleno de nuevo, para su aprobación inicial.
Según explicaron desde Ciudadanos Lezcano y Obiol, “para el final de la legislatura podríamos tener un nuevo PGOU”. Algo que el arquitecto urbanista de la Universidad de Alcalá, Carlos Clemente, considera un reto que se podrá conseguir gracias al clima de consenso que percibe ahora, similar al que se alcanzó con la declaración de Patrimonio de la Humanidad.
Para el alcalde de la ciudad, Javier Rodríguez, “este plan supondrá abrir nuevos espacios para la inversión económica y la generación de Empleo en Alcalá, pero también preservar más de 5000 hectáreas de espacios protegidos, así como hacer una ciudad más cohesionada solucionando asignaturas pendientes como Química Sintética”.
Así, uno de los puntos claves del nuevo PGOU es la generación de actividad económica. Como afirmaba la portavoz popular, Judith Piquet, “el PGOU es un tema prioritario para la ciudad, porque no podemos permitir que se pierdan más oportunidades de empleo por no tener suelo disponible”.
Y es que una de las soluciones más importantes que va a traer este nuevo plan es la posibilidad de reorganizar el suelo productivo e industrial. Como explicaba el presidente de AEDHE, este plan ofrece “muchas posibilidades de suelo económico productivo”. Pero no todo es la industria, en palabras de Jesús Martín, “una ciudad ha de procurar diseñarse con vista a que nuestro futuro tenga posibilidades de desarrollo profesional y de residencia”.
Ahí es donde surgieron las mayores críticas a este plan, para el que el portavoz de VOX afirmó durante el pleno que sería necesaria la dotación de suelo para crear “unidades residenciales unifamiliares”.
Por su parte la portavoz de IU-UP, que se abstuvo en la votación mientras su compañero de despacho, David Cobo votaba en contra, aseguró que “Alcalá está devaluado. La creación de suelo industrial y de especulación inmobiliaria nunca irán en nuestro sentido de entender esta ciudad”.
Pero ahora es el momento de que se presenten las sugerencias al nuevo documento y está en manos de Comunidad de Madrid incluirlas en el PGOU que organice nuestra ciudad.
Grandes Lagunas
En opinión del arquitecto de la Universidad de Alcalá, Carlos Clemente, el proyecto del PGOU es un buen documento, pero que tiene grandes lagunas: