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Muchas veces no valoramos los logros que se consiguen en disciplinas que son minoritarias y tienen menos repercusión que otros deportes. No nos damos cuenta de la gran pasión y esfuerzo que le dedican estos deportistas y Sandra es un gran espejo de Alcalá donde podemos ver reflejada esta realidad.
La arquera entró en contacto con este deporte por su padre, que ya lo practicaba y, desde ese momento, le llamo la atención: “Mi padre tenía un arco y de vez en cuando lo usaba, me llamó la atención y me dije… ¿por qué no probar?”
Sandra nos habló de sus entrenamientos para estar preparada para la competición y destacó su esfuerzo técnico, y la importancia ante todo del plano psicológico: “el factor psicológico es muy importante al ser un deporte individual y tienes momentos en los que no entran las flechas o tiras peor que otros días y te da para pensar.”
El Club Sagitta es uno de los mejores clubes que hay a nivel nacional
La alcalaína acudió al Torneo internacional de Antalya representando a la selección española: “me vino de sorpresa porque no me había ganado la plaza, pero por circunstancias tuve la oportunidad.”
Aunque no se lo esperaba, la ilusión y el trabajo se vieron recompensados: “Mi objetivo era pasármelo bien y disfrutar, todo lo demás me pilló de sorpresa.” Poco a poco fue avanzando rondas hasta llegar a la final: “veía que iba pasando eliminatorias y pude vivir la experiencia hasta el final.”
Cebrián llena de elogios a su club, declarando que es “uno de los mejores clubs que haya nivel nacional.” La arquera destaca el lujo que supone tener su campo de tiro fuera y a la vez pegado al pabellón cubierto lo cual facilita mucho los entrenamientos.
En cuanto a la metodología destaca que: “no hay una metodología clara porque cada uno tiene sus objetivos, pero todos los integrantes que lo componen no tienen ningún problema en ayudarte.”
Sandra centra todos los focos en tener una plaza fija en el equipo nacional: “Mi reto más cercano es intentar entrar en el equipo nacional.” En cuanto a sus objetivos a largo plazo, prefiere centrarse en el presente, aunque le gustaría “ir a unas olimpiadas.”
Agradece, por último, el apoyo que recibe de toda la gente que tiene detrás, que siempre la está apoyando: “Les doy las gracias. Muchas veces confían más en mí de lo que lo hago yo y sin esos apoyos perderías ese disfrute que tienes porque sabes que hay gente que te está apoyando y valora lo que estás haciendo.”
Quién sabe si en Tokio, una de sus flechas puede traernos volando una medalla para España y para Alcalá.