El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid concluía recientemente con la firma de un convenio de colaboración ahora refrendado entre el Ministerio de Fomento, el propio Ejecutivo regional y el Ayuntamiento de Alcorcón para la rehabilitación de un total de 250 inmuebles en el área de San José de Valderas. El proyecto, enmarcado dentro del Programa de Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas (ARRUR), ha dado como fruto la formalización del mismo entre el consejero de Vivienda y Administración Local del Ejecutivo regional, David Pérez, y la alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés.
En materia presupuestaria, las ARRUR supondrán la realización de importantes actuaciones de mejora de la calidad y sostenibilidad del medio urbano por un importe superior a los 83 millones de euros, que se financian conjuntamente por las administraciones públicas intervinientes y por parte de los vecinos que reformen sus viviendas. De esta cantidad, según las cifras que maneja el Gobierno regional, el desglose quedaría de la siguiente forma: corresponden al Plan Estatal de Vivienda más de 34 millones de euros; a los ayuntamientos, más de 12 millones de euros; y, a los particulares, más de 36 millones de euros.
Un total de 21 barrios de 23 municipios de la región verán rehabilitadas sus viviendas, calles y urbanización a través del Programa de Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas
El acuerdo tiene como fin la financiación de la realización conjunta de obras de rehabilitación en edificios y viviendas, incluidas las unifamiliares, de urbanización o reurbanización de los espacios públicos y, en su caso, de edificación de edificios o viviendas en sustitución de edificios o viviendas demolidos. Las actuaciones programadas tienen por objeto la solución integral de cimentación perimetral y la del interior, para resolver los problemas existentes de movimientos entre los edificios, las grietas y fisuras producidas.
Además, se realizará la sustitución de la red de canalones y bajantes exteriores y de la red horizontal de saneamiento hasta la acometida al pozo general para resolver los problemas de saneamiento horizontal, derivados del mal estado de los entronques, arquetas y pozos; la adecuación al Reglamento electrotécnico para baja tensión y a la normativa de protección contra incendios en los edificios; la instalación de ascensores y rampas salva escaleras, así como la sustitución de carpinterías y acristalamientos para el mejor aislamiento térmico.