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Los castillos de San José de Valderas serán próximamente Bien de Interés Patrimonial, pues la Comunidad de Madrid ha iniciado los trámites para reconocer el valor arquitectónico e histórico de dos de los principales símbolos de Alcorcón.

La directora general de Patrimonio Cultural de la Comunidad, Paloma Sobrini, ha declarado su intención de “reconocer el valor de los edificios de la finca de San José de Valderas de Alcorcón, como arquitectura palaciega no defensiva, ejemplo del cruce de influencias culturales característicos de su estilo”. Esta es, sin duda, la mejor prueba de que nuestros Castillos se han convertido en un referente cultural, siendo uno de los pilares de la historia de nuestra ciudad .

Por tanto, “a partir de ahora nadie podrá eludir su deber de cuidar los Castillos, que en el pasado han sufrido rehabilitaciones inadecuadas y agresiones paisajísticas en su entorno”, ha expresado el alcalde de Alcorcón, David Pérez, con motivo de este inminente reconocimiento. Una distinción que, gracias a la Ley de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, fomentará la conservación y el mantenimiento de los Castillos a través de subvenciones y otras medidas.

Un siglo de historia

Hace algo más de 100 años, el arquitecto Luis Sainz de los Terreros construyó por encargo del marqués de Valderas dos castillos que combinaban a la perfección diferentes estilos, entremezclando la estética de las fortalezas francesas y de las mansiones de campo inglesas. Además, el prestigioso arquitecto, artífice de edificios tan destacados como La Adriática (Plaza de Callao) o el Círculo de la Unión Mercantil e Industrial (Gran Vía), se atrevió a incluir en esta obra detalles de los estilos gótico y mudéjar. Una gran obra para el marqués, que fue visitada por grandes personalidades de la época como el rey Alfonso XII o el dictador Primo de Rivera.

Desde su inauguración, los castillos de Valderas han estado presentes en algunos de los capítulos y anécdotas más importantes de la historia de Alcorcón. Ejemplo de ello fue uno de los avistamientos de OVNI más famosos de nuestro país, cuando en 1967 un millar de personas afirmaba haber visto un platillo volante sobre los Castillos. Un fantasioso relato que décadas después fue considerado un fraude del caso UMMO.

Las centenarias edificaciones también han sido testigo de la Guerra Civil, sirviendo de lugar de observación al bando franquista y quedando completamente destrozados durante el transcurso de la contienda. Los Castillos no fueron renovados hasta 1991, cuando los arquitectos Enrique Fombella y Eduardo Paniagua se encargaron de dotar a estos símbolos alfareros de su aspecto actual.