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El Alcorcón volvía a jugar como local después de conseguir la victoria la jornada pasada contra el Real Oviedo. Esta vez recibía al Amorebieta, uno de sus mayores rivales en la lucha de la permanencia en Segunda División. Ambos equipos llegaban con buena dinámica al encuentro, pero no lograron decantar el resultado y terminaron el partido con mal sabor de boca.

El partido comenzó de la mejor manera posible para los locales, en el minuto 4 pitaron una falta cerca de la esquina del área de los vascos, y Jacobo González se inventó un golazo que entraba en la escuadra de la portería como un misil. El gol hizo que el Alcorcón diera un paso atrás y el Amorebieta comenzó a apretar. Tan solo 14 minutos después, la alegría alfarera se apagó y el empate volvió al marcador. El 9 visitante, Eneko Jauregi, puso el empate a uno con un buen cabezazo en el segundo palo.

Los alfareros reaccionaron bien al golpe y dieron un paso adelante teniendo dos ocasiones clarísimas antes del descanso, primero Chiki falló un mano a mano contra el portero rival, y después el goleador Jacobo se quedó a centímetros de meter otro golazo.

Después del tiempo de descanso el Alcorcón volvió a tener ventaja en el partido, pero esta vez en jugadores. Un mala entrada a destiempo del defensa visitante, Bustinza, provocó su segunda amarilla y por consecuencia, su expulsión. Con uno más sobre el terreno de juego los amarillos comenzaron a asediar a los vascos, pero se chocaron con un gran Mangunagoita y no lograron adelantarse en el marcador, acabando el partido 1 a 1.

A pesar de sumar un punto, los alcorconeros perdieron la oportunidad de sumar 3 puntos vitales contra un equipo en desventaja y así, tomar ventaja en la carrera por la permanencia. A pesar del mal sabor de boca, el Alcorcón sigue una jornada más fuera del descenso con una ventaja de un punto sobre su perseguidor, el Albacete. El lunes 8 viajarán a Santander, donde se verá las caras con un gran equipo en racha como es el Racing de Santander.

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