Hace unos años los ayuntamientos españoles vieron coartada su capacidad de decidir el lugar al que iría destinado el superávit de los municipios. Montoro tomó esta decisión para evitar los endeudamientos masivos de algunas localidades que se incrementaron en la pasada crisis.
Este año, desde el gobierno central se ha apostado por la posibilidad de acceder a estos fondos económicos para resurgir algunas zonas. Desde el consistorio de Aranjuez ya han anunciado cuál va a ser el paradero del superávit correspondiente al 2019.
En total se van a destinar 1,2 millones de remanente de tesorería generados durante el ejercicio de 2019 al pago de distintas deudas contraídas por el consistorio en años anteriores.
A través de esta partida económica, el consistorio destinará 539.500 euros al pago de una sentencia de 2018 del Tribunal Superior de Justicia de Madrid relativa al justiprecio fijado por la expropiación de una finca en la Carrera de Andalucía y 80.675 euros al pago de deuda financiera.
Además, el consistorio también va a destinar 586.000 euros a financiar un convenio suscrito en 2011 entre el consistorio, la extinta empresa municipal de suelo SAVIA y Unión Fenosa para el traslado a otra parcela de la subestación eléctrica del barrio de Agfa.
La concejala de Hacienda, Belén Barcala, ha asegurado que “no se ha apostado por un destino caprichoso de este remanente de tesorería” y ha señalado la “imposibilidad de acometer los expedientes de contratación” que podrían permitir destinar ese dinero a proyectos sociales relacionados con la Covid-19.