La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha comparecido después del consejo de gobierno para anunciar que su consejero de Educación y portavoz, Enrique Ossorio, pasará a ocupar también la vicepresidencia del gobierno regional.
El nombramiento de Ossorio como vicepresidente tiene la misión exclusiva de "coordinar la acción de gobierno" para definir su proyecto a largo plazo, pensando en los “próximos diez o veinte años, una decisión que no se ha de tomar de un día para el siguiente, para meterlo en un programa electoral”.
La presidenta ha explicado que este cambio se debe porque el Gobierno regional es consciente de que Madrid “está viviendo un momento excepcional, donde cada vez recibimos más proyectos y más estudiantes”.
“Estamos más de moda que nunca y lo que nos gustaría es que este momento perdure y que el crecimiento de Madrid sea sostenible y llegue a todos los rincones de la Comunidad y a todos los ciudadanos”, ha sostenido. Para eso, ha añadido, es “fundamental no improvisar medidas ni un programa cortoplacista”.
Enrique López pierde peso en el Gobierno
El nuevo cargo de Enrique Ossorio hace que otro consejero, en este caso, él de presidencia, justicia e interior, Enrique López, pierda peso en el ejecutivo de Ayuso, ya que la labor de coordinación era tarea de la Consejeria de presidencia.
Esta labor de coordinación es más simbólica que real, pero no deja de ser un síntoma de la perdida de influencia de Lopez en el ejecutivo autonómico. El cambio de un Enrique por otro solo reafirma que el titular de educación ha ido adquiriendo cada día más presencia y peso hasta ocupar la vicepresidencia y convertirse de facto en la mano derecha de Ayuso.