De gira por Estados Unidos como una estrella del rock o como Britney Spears, que diría la protagonista. Isabel Díaz Ayuso ha estado de periplo por USA presumiendo de las políticas que ha puesto en marcha en la Comunidad de Madrid en contraposición a la gestión de Pedro Sánchez desde la Moncloa. Las comparaciones son odiosas, pero ya sabemos que la presidenta siente debilidad por ellas.
La presidenta siente debilidad por las opiniones
Su desembarco en EEUU no ha traído grandes y elocuentes intervenciones. Su discurso ha mantenido las mismas consignas de siempre: abajo el comunismo, arriba la libertad y la demonización de las políticas restrictivas frente al covid. Ha sido un viaje huérfano de contenido, pero muy simbólico, que es probablemente lo que perseguía. Ayuso continúa esforzándose en moldear su figura política a la medida de un líder nacional. Parece como si la presidenta no solo buscase hacerse con el PP de Madrid…. Su figura está al alza mientras parece que Pablo Casado pierde chispa en detrimento de la popular madrileña. El timón del PP parece en juego y Ayuso está de moda.