El colectivo LGTBI de Japón hace brillar el arcoíris y obtiene una de sus primeras victorias tras haberse creado una nueva Ley que prohíbe cualquier discriminación injusta hacia las minorías sexuales. Una situación que ayuda a ver el avance de las personas homosexuales en ciertos países donde parecía ser imposible o bastante complicado.
Sin embargo, este proyecto de ley ha recibido fuertes críticas tanto por los activistas de la comunidad LGBT como todas las personas que se posicionan contrarios a ella. Los primeros aseguran que no cumple con las expectativas de lo que se les solicitaba, porque no puede ser que solo afecte a las “discriminaciones injustas” sino cualquier tipo de discriminación debería de estar prohibido.
A pesar de esto, aunque lleven razón para mi parecer hay que sentirse un poco orgullosos de que un país como Japón haya sacado una ley para proteger, aunque sea en cierto modo, a las personas homosexuales. Eso sí, aún queda por avanzar porque que el matrimonio igualitario aún esté prohibido es un gran retraso y debería de estar regulado dentro de esta ley.
En cuanto a las personas contrarias a esta ley, han puesto el foco en las divisiones de la sociedad que pueden llegar a generar y “los procedimientos abusivos de la justicia”, cuando no se dan cuenta de que el único abuso es el que están realizando ellos hacia una gran parte de la población que vive con miedo y sin ser ellos mismos para que no se les juzgue.