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Estos años de pandemia han sido muy duros para los servicios médicos de todo el mundo que, pese a ello, han seguido luchando y dando la cara por dar lo mejor a todos sus pacientes. Un esfuerzo que, a veces, se recompensa con certificaciones internacionales como la que ha recibido el servicio de Oncología clínica del Hospital 12 de Octubre de Madrid, expedida por la American Society of Clinical Oncology por "su compromiso con la excelencia y la mejora continua de la calidad en su práctica clínica diaria".

"Lo que de alguna manera representa esta acreditación es que hacemos las cosas como debemos de hacerlas", nos explica en la entrevista el Dr. Luis Paz-Ares, jefe de Oncología del hospital, "este es un tipo de certificación que tiene definidos unos estándares sobre cómo se deben de atender a los pacientes, cómo debe ser el proceso de atención al paciente cada vez que viene a la consulta, cómo hacemos los registros, qué tipo de información adquirimos de cada paciente, qué preocupación tenemos, no solo de la enfermedad sino de cuestiones sociales o emocionales... ósea, una manera de 360º de ver cómo es la atención del paciente".

Esta certificación llega después de una solicitud del propio hospital y tras más de un año de continuas comprobaciones y auditorías para comprobar si este servicio clínico era merecedor de un título tan prestigioso. "Hay una serie de chequeos y finalmente se hace una auditoría y en función de ello, se da una certificación si atiendes a los pacientes de forma adecuada. No deja de ser sino un archivo de calidad", asegura Paz-Ares.

Por supuesto, al igual que otros muchos servicios del hospital, el área de Oncología del 12 de Octubre también ha tenido que saber adaptarse a la situación sanitaria actual, un proceso de cambio que ha afectado tanto a pacientes como a médicos para poder asegurar la salud y el control en todos sus pacientes.

"La pandemia ha sido una revolución para el tema sanitario. Desde luego, también para los pacientes oncológicos por varias razones. La primera de ella porque, claro, en la situación inicial, el sistema sanitario dedica los recursos a lo que es hiper urgente y a veces se resiente en lo que es muy importante, pero no tan urgente como pueden ser las enfermedades cardiovasculares o el cáncer", nos cuenta el doctor.

"En segundo lugar, hemos tenido que adecuar mucho nuestros dispositivos asistenciales para que los pacientes no se infectaran, para hacerlo con la mayor seguridad. En tercer lugar, nuestros pacientes tienen una complejidad adicional porque como están con tratamientos que muchas veces afecta a las defensas, eso les pone en particular riesgo de cualquier infección. Hemos tenido que cambiar muchos recursos para atender a los pacientes de forma telemática", continúa Paz-Ares, "hemos transformado a nuestros circuitos para que intentar que nuestros pacientes sean atendidos con la mayor seguridad posible. Hemos adecuado las pautas de tratamiento para no ponerles en riesgo. Hemos evitado que el paciente viniera a nuestra consulta siempre que no fuera necesario. Ósea que sí nos hemos transformado en gran medida".

Un trabajo que ha sido premiado con una certificación de prestigio internacional que, de momento, se quedará el servicio de Oncología del 12 de Octubre hasta el año 2024.