El proyecto de investigación, cuya responsable es la Dra. Laura Palomino Pérez de la Sección de Gastroenterología y Nutrición del Hospital Niño Jesús, ha conseguido una de las Ayudas a la investigación en Salud concedidas por la Fundación Mutua Madrileña.
La investigación se basa en el estudio de la microbiota, también conocida como flora intestinal, de los niños que se someten a un trasplante de progenitores hematopoyéticos (trasplante de médula). El objetivo es valorar cuáles tienen más riesgo de desarrollar la enfermedad injerto contra huésped (EICH).
La enfermedad de EICH se produce cuando las células trasplantadas reconocen como extrañas a las del organismo del paciente
La enfermedad de EICH se produce cuando las células trasplantadas reconocen como extrañas a las propias del organismo del paciente y las atacan y destruyen. Para Laura Palomino con este estudio “se conseguirá una detectar a los pacientes más susceptibles para poder aplicar un tratamiento más precoz y dirigido y mejorar así los resultados”.
Los tratamientos que se aplican actualmente para esta enfermedad consiguen efectos de forma completa entre el 50 y 60 por ciento de los pacientes. Por eso, la doctora comenta que si consiguen detectar qué factores determinan el pronóstico "podemos tratarlo, es decir, si sabemos que una afectación más extensa del tubo digestivo condiciona a tener peor pronóstico se le puede aplicar un tratamiento más agresivo”.