El grupo Hogar Social Madrid, organización que propugna ayuda solamente para ciudadanos españoles en situación de pobreza, ha okupado de nuevo el antiguo edificio de la calle Joaquín Costa -esquina Velázquez- en Madrid, en su día perteneciente al NO-DO y que a su vez fue sede de RTVE, y del que fueron expulsados hace cinco años. Esta sería la segunda ocupación de dicho edificio, en el que permanecieron entre octubre de 2015 y marzo de 2017. En otras ocasiones y durante los últimos años han okupado también otros lugares de los que fueron igualmente expulsados: la exsede de CC.OO. en la calle Cristino Martos, el banco de Madrid en la Plaza de Colón, el Ministerio de Trabajo ubicado en la vía Bretón de los Herreros o la que fuera sede del Registro de la Propiedad en la calle Príncipe de Vergara.
“Volvemos a ocupar la antigua sede de RTVE, propiedad del Estado. El gobierno, que tiene en desuso gigantescos edificios de titularidad pública, abandona a miles de españoles en situación crítica mientras regala el dinero de todos a inmigrantes y refugiados. SOMOS LO QUE HACEMOS”, escribían en su perfil de Twitter.
El movimiento Hogar Social propugna ayudas y realiza recogidas de alimentos únicamente para ciudadanos españoles.
Critican, mediante un vídeo hecho público en sus redes, la política social del Ejecutivo nacional, a quien acusan de “absoluto abandono y despilfarro”, al asegurar que "incumple con sus obligaciones con el pueblo español”, y solicitan ayudas públicas para miles de españoles “que en medio de esta crisis económica no pueden hacer frente al pago de una hipoteca o de un alquiler”, enfrentándose a “la crueldad de los desahucios” y a “no saber cómo darán de comer a sus hijos”. Acusan al Gobierno de “servilismo con quienes vienen de fuera, haciendo gala, una vez más, del desprecio que sienten hacia nuestra gente”.
“Luchamos y lucharemos, con humildad y persistencia, por aquellos españoles que necesitan un hogar donde vivir, que necesitan un plato caliente para sus familias. Por todos aquellos que necesitan sentir que algunos españoles no se rinden”, finalizan el comunicado.
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