Mercedes González, delegada del Gobierno en Madrid, ha sugerido a la Comunidad que imponga un nuevo toque de queda para evitar las aglomeraciones que se han visto en la ciudad a lo largo de este fin de semana.
"Esperábamos que la gente lo viviera como una fiesta de fin de año, una explosión como un corcho en una botella, pero yo pensé que la gente iba a ser más responsable y no ha sido así", confesaba González en una entrevista con Telemadrid en la que ha asegurado que con el toque de queda "todos estaríamos más seguros. Hay comunidades que lo han conseguido y otras que no. Las que lo han conseguido han tenido una noche más tranquila que las que desgraciadamente no lo tenemos".
González también ha recordado la negativa de la Comunidad de Madrid de imponer un toque de queda, "no van a estar a favor, ya lo han dicho", y les ha instado a encontrar otras medidas restrictivas haciendo uso de la autoridad de la que goza el gobierno regional.
La delegada no cree que el Gobierno central tenga que imponer normas comunes para todas las regiones pues "las comunidades que quieren ser responsables y tomar medidas y afrontar la situación sanitaria con seguridad lo tienen en su mano".
Durante la noche del sábado al domingo, en la ciudad de Madrid se pudo ver cómo los ciudadanos aprovechaban el fin del estado de alarma, que equivalía al fin del toque de queda, juntándose en las calles para disfrutar de la compañía de los amigos y del alcohol.
Estas imágenes de aglomeraciones y personas sin mascarilla han preocupado a las autoridades que ahora buscan una forma de controlar las reuniones masivas de personas en la calle.