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La reapertura de las Urgencias en Madrid, una auténtica "pesadilla"
Los socialistas afirman que, de los 78 nuevos Puntos de Atención Continuada, solo 6 estuvieron operativos el pasado sábado
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El portavoz socialista Juan Lobato ha reclamado a la presidenta Isabel Díaz Ayuso y al consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, “que suspendan sus vacaciones y vuelvan a sus puestos de trabajo este puente para rectificar la pesadilla de las Urgencias”. Así lo ha afirmado tras comprobar el mal funcionamiento de los recién estrenados Puntos de Atención Continuada, durante este fin de semana.

Más que de Halloween, está siendo el puente de la pesadilla para las familias madrileñas. Existe un grave riesgo para los pacientes y pueden vivirse dramas y situaciones médicas irreparables que estamos a tiempo de evitar”, afirma Lobato. Por eso ha pedido soluciones.

Los datos que detallan los socialistas es que de los 78 centros que han abierto en los pasados días y que se pensaba cubrir con el personal de los antiguos 40 SAR, “el resultado es que solo 6 de ellos han podido estar plenamente operativos”.

La situación de los PAC ha sido recogida por la Plataforma SAR que han comprobado que el 93% de los centros de urgencias no tenían el personal necesario (médico, enfermero y celador) para atender a los pacientes. Y también ha sido constatado por los alcaldes y portavoces de los socialistas en los distintos municipios de la región.

Por su parte, la Comunidad acusa a los sanitarios de estar en medio de una huelga encubierta y denuncia bajas masivas que los sanitarios. Los trabajadores se defienden afirmando que no pueden atender un servicio de 78 puntos con el personal que había para 40, que es imposible. Y los socialistas recuerdan que la Comunidad ha despedido a 6.000 sanitarios tras el final de la pandemia.

Todos estos desajustes de personal, ya están creando no pocos problemas. Así, el PSOE denuncia que en Torrelaguna se vivieron momentos de tensión este sábado a las puertas de las urgencias cerradas en Torrelaguna donde tuvo lugar una concentración ciudadana espontánea que incluso requirió la actuación de la Guardia Civil.

En Torrelodones, el centro de salud no estuvo operativo durante todo el día y lo único que hubo fue un coche del Summa 112. Tras horas cerrado, el centro fue abierto por un vigilante de seguridad que después se marchó.

En Moralzarzal, el PAC no llegó a abrir ante la ausencia de personal. En Soto del Real, tuvo que volver la enfermera, a la que se le pidió hacer 39 horas seguidas de trabajo. En La Cabrera, ante la imposibilidad de trabajar sin enfermera, el médico pidió irse a su casa y se le amenazó con acusarle de abandonar su puesto de trabajo. En Galapagar, el centro se mantuvo cerrado durante toda la jornada.

Y en el PAC de Guadarrama, dos sanitarios fueron agredidos ante la precaria situación en la que se encontraba el Centro que no podía atender con condiciones normales, según denuncia la Plataforma SAR en sus redes sociales.

En municipios grandes, como Fuenlabrada, también se registraron problemas. El portavoz de Unidas Podemos en la localidad, Pedro Vigil, informó el viernes que el PAC abrió sin electrocardiograma ni desfibrilador, algo que se solucionó al día siguiente. Durante el fin de semana, el servicio ha contado con un celador, dos enfermeras y un médico, personal insuficiente para una población de cerca de 200.000 personas.

La Asociación de Médicos y Titulados Superiores (Amyts) irá a la huelga indefinida a partir del 7 de noviembre tras rechazar un preacuerdo con la Comunidad de Madrid.

Un quebradero de cabeza

La reapertura de los servicios de urgencias extrahospitalarias en la Comunidad de Madrid está suponiendo un verdadero quebradero de cabeza para la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso. Después de meses en los que la administración regional ha ido cambiando los planes, hace unas semanas se anunció que los madrileños tendrán 78 nuevos Puntos de Atención Continuada (PAC) que sustituyen a los SUAP y los SAR (Servicios de Atención Rural)

Estos nuevos PAC se abrieron el pasado 27 de octubre, pero los sindicatos que reúnen a enfermeros, médicos y resto de personal médico alzaron la voz para alertar que la Comunidad pretendía reabrir estos centros con el mismo personal con el que se contaba para atender a la mitad de las urgencias. Llegaron a un preacuerdo la semana pasada, del que se descolgó Amyts, la Asociación de Médicos y Titulados Superiores que irá a la huelga indefinida a partir del 7 de noviembre.

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