Pese a que muchos miraban el año 2021 con optimismo, sobre todo después del 2020 tan horrible que nos tocó vivir, este año que ya se acaba no ha demostrado ser mucho mejor que el anterior, lo que, aun así, no ha conseguido que los españoles miremos al 2022 con mucho más optimismo que nuestros vecinos europeos.
Así lo ha demostrado la Encuesta Mundial de Final de Año de Gallup, que en España ha sido realizada por Sigma Dos entre los meses de octubre y diciembre. Realizada en 44 países de alrededor del mundo, se hizo antes del avance de la variante ómicron que, quizá, podría haber alterado los resultados.
Más del 50% de los españoles consultados cree que 2022 va a ser un año mejor que el que dejamos, cuatro puntos por encima de los resultados de la encuesta en 2021. En comparación con el resto del mundo somos más optimistas que la media y hablando solo de Europa, somos los que más, sobre todo si nos comparamos con nuestros vecinos italianos, que se han descubierto como los más pesimistas. El fuerte azote del virus al principio de la pandemia no ha conseguido recuperar las expectativas del antiguo imperio romano, que en su desánimo se asemejan más a los países del este como polacos y búlgaros.
La mitad de nuestro país se describe como feliz o muy feliz, frente a un 11% que se considera infeliz, y un 34% que no sabe o no contesta
Pero en España no vemos con optimismos únicamente el futuro sino también a nosotros mismos, pues la mitad de nuestro país se describe como feliz o muy feliz, frente a un 11% que se considera infeliz, y un 34% que no sabe o no contesta. No obstante, se nota el efecto de la pandemia, pues comparado con 2019, esta cifra baja en 20 puntos y con respecto a 2020, 13 puntos.
"En el caso de España se da una aparente contradicción: por un lado, somos menos felices que en 2019 y 2020; por otro, somos más optimistas que el año pasado. Esto puede deberse a que, tras dos años de pandemia la sociedad experimenta un cansancio psicológico seguido de una necesidad de creer, con las vacunas, que la vida mejorará", explica Rosa Díaz, de Sigma Dos.
Aun así, no somos de los países que más diferencia tiene entre aquellos que dicen ser felices y los que no, pues el primer puesto lo sigue ocupando Japón, considerado "el país más feliz del mundo", seguido de Argentina, Australia y, finalmente, España.