MENÚ

"Nueve de cada diez padres ignora que sus hijos adolescentes consumen pornografía de manera frecuente". Este es uno de los sorprendentes datos a los que ha llegado a la conclusión un estudio realizado por Save the Children sobre el consumo de pornografía online por parte de adolescentes. Unos datos que han servido para que la FAD (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción), comience una campaña para concienciar a los padres de que tienen que llevar la iniciativa en la salud sexual de sus hijos.

"Hemos lanzado una campaña para concienciar a los padres sobre el consumo de pornografía que está habiendo por parte de los menores y cómo esto afecta al desarrollo de su sexualidad que se está formando en esas edades en el que el consumo de pornografía es muy negativo", nos cuenta María Renovales, directora de comunicación de la FAD.

Pero este no es único dato preocupante, pues 7 de cada 10 adolescentes de entre 13 y 17 años consumen pornografía de forma frecuente, mientras que el 30% de los menores de entre 8 y 12 años reconoce que esta es su única fuente de información sexual; una fuente cuyos contenidos suelen ser violentos en su 80%. Una violencia que se ejerce principalmente hacia las mujeres y que escenifica que en el 95% de los casos que la mujer disfruta con ello.

"La verdad es que es un problema que reciban esa información sexual a través de la pornografía que consumen de forma gratuita online, pues esa es una tarea que tienen que asumir los padres y madres en la familia e incluso también en la escuela", se lamenta Renovales, "esto luego les afecta a sus comportamientos porque normalizan lo que ven en estas escenas, la cosificación de la mujer, la falta de consentimiento. Las relaciones afectivas sexuales sanas conllevan otro tipo de cuestiones".

"9 de cada 10 padres ignoran que sus hijos consumen pornografía online. Nosotros en la FAD les damos información, pautas, claves, a los padres y madres de familia para que sepan como abordar estas cuestiones en familia. Nunca es tarde para hablar de ello, cuanto antes se empiece mejor, pero nunca es tarde", explica la portavoz, que reconoce que todavía es un problema esa falta de comunicación de los progenitores con sus hijos acerca de la educación sexual.

"Todavía queda mucho camino por recorrer, es importante que los padres se quiten ese miedo, ese pudor de pensar que ya se lo contarán en el colegio y afrontarlo ellos", afirma Renovales que, a pesar de que reconoce que hay docentes que hacen un trabajo estupendo en la educación sexual de los adolescentes, la responsabilidad sigue siendo de los padres,"hay docentes que están haciendo un trabajo magnífico, pero hay que hacer más y tampoco ponerles la responsabilidad a los profesores".