Otro año y otro nuevo fracaso. Pese a la canción tan sentimental de nuestro representante Blas Cantó, España certificó que eso de cantar no es lo nuestro. La 65ª edición de Eurovisión contó con la novedad del televoto, lo que le sirvió a Italia coronarse como la campeona de este año y romper las apuestas, ya que pese a que se situaba como una de las favoritas, parecía que sería Francia o Suiza quienes se llevaran el gato al agua. Con la canción rockera de Zitti e Buoni, el país transalpino ganó la edición 65ª celebrada en Rotterdam, pues Holanda fue la última ganadora del concurso en el año 2019, y el pasado 2020 no hubo gala debido a el covid.
Italia ganó gracias al televoto
Blas Cantó, y su balada de `Voy a quedarme´ apenas recibió seis puntos del jurado y cero de los espectadores, quedando en 24º posición. España no gana un festival desde 1969 con la canción de `Vive cantando´de Salomé. Por otra parte, la inclusión del televoto fue fundamental en la gala, favoreciendo a Italia y dejando con la miel en los labios a franceses y suizos, segundos y terceros respectivamente, en una noche donde las reivindicaciones feministas en las canciones también fueron las protagonistas, junto a las ausencias en el plató por positivos covid o cuarentenas como las del ganador de la última edición Duncan Laurence o la banda islandesa Daði & Gagnamagnið.
.