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La Comunidad de Madrid destina más de 300.000 euros a un programa especializado que promueve la inserción laboral de personas con discapacidad física y que se encuentran en una situación de paro prolongado. La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, ha visitado el Aula de Apoyo a la Inclusión Sociolaboral, gestionada por la Fundación Juan XXIIII, entidad social que lleva desde 1966 trabajando por este colectivo.

Los profesionales de esta aula trabajan en coordinación con los de los Centros Base de la Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad para realizar las derivaciones, para mejorar la empleabilidad de sus participantes, la mayoría de ellos parados de larga duración. Allí acuden a clases de formación y entrenamiento de habilidades y competencias para ayudarles a encontrar un empleo.

En su visita, Dávila ha recalcado “el firme compromiso del Gobierno regional con las personas con discapacidad para que puedan ser cada día más independientes y vivir una vida plena y llena de oportunidades”.

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