La palabra ahorrar esta cada vez más en boca de todo el mundo y más cuando se van acercando las vacaciones y nos gusta tener un dinerillo extra para irnos a la playa, a un viaje cultural o simplemente de camping o a nuestro pueblo. El problema, es que, con la subida de la luz, la gasolina, el IPC, etc, tenemos más difícil hacerlo. Pero bueno, lo primero es organizarnos y controlar qué gastos tenemos mensualmente.
Así que, como decíamos, lo primero haz un listado con todos los gastos mensuales que tienes en casa, no te dejes ninguno, los básicos, las telecomunicaciones, los de ocio, salidas y viajes… Deja también un parte comodín para regalos de cumpleaños e imprevistos que siempre suelen surgir…
Y, Quizás seas también de las familias que cuentan con algún tipo seguro médico. No te olvides ponerlo y empieza haciendo un análisis de la competencia con un comparador seguros de salud Madrid. Así podrás ver si tu seguro es el que mejor se adapta a tus necesidades y tienes el mejor precio, Aquí ya puedes ahorrarte un pico.
Un listado de ejemplo podría ser este:
Si contamos con una segunda residencia, es necesario repetir la misma lista y hacer el sumatorio de ambas. Una vez hecho esto, esto son todos tus gastos.
El principal objetivo de hacer esta lista es apuntar al lado, primero si es un gasto imprescindible, segundo cuánto nos cuesta al mes y tercero, si hay posibilidad de suprimirlo o de reducirlo de alguna manera, cambiando de proveedor o limitando su uso. Así que, si tienes la posibilidad de alguna de esas opciones, coge el teléfono y dedica un día a reducir estos gastos extras. Recuerda que en Internet puedes encontrar comparadores de precios para todos estos servicios.
¿Cuáles son tus trucos para ahorrar en casa?
Y ahora aquí, es cuando empiezan los trucos que puedes seguir para ahorrar un poco más cada mes.
A los clásicos de poner el lavavajillas siempre a carga completa, usar la lavadora, siempre que se pueda en frio, secar la ropa al aire y evitar la secadora, podemos añadir otros menos clásicos como no abrir el horno durante la cocción e intentar usar las dos bandejas para cocinar dos platos a la vez (evidentemente, dos platos similares que no se mezclen los sabores). Apúntate al Batch Cooking, organiza y prepara todas las comidas de la semana el domingo y evitarás poner la cocina todos los días.
Otro clásico, que imaginamos casi todo el mundo ha hecho ya, cambia todas las bombillas de casa por bombillas de bajo consumo.
Y por último, en cuanto a climatización, si con una chaqueta o poniéndote la bata puedes evitar poner la calefacción, o viceversa, quedándote en manga corta y abriendo las ventanas puedes evitar poner el aire acondicionado… ¡¡Hazlo!! Por tu economía y porque no, también por el planeta.
Muchas veces, cuando vamos a hacer la compra no llevamos una lista con lo que realmente necesitamos, como mucho la llevamos mental, así pasa, que se nos olvidan unas cosas y de otras compramos de más. Pues a partir de ahora, si quieres ahorrar, es imprescindible que siempre lleves tu lista de la compra e intentar respetarla al máximo. La lista nos ayudará a evitar comprar compulsivamente cosas que no necesitamos. Esto no significa que no podamos coger algún capricho, pero si puedes contemplarlo de antemano, añádelo a la lista antes de ir.
Cuando vas al super o al mercado, intenta aprovechar las ofertas y adaptar tu menú semanal a ellas. Porque sí, otra forma de ahorrar es tener claro y planificar que vas a comer durante la semana, así te será más fácil adaptarte a las ofertas. Aprovecha los lotes de carne, pollo que tienen en muchos mercados o los 3X2 o los descuentos en la segunda unidad que tienen muchos supermercados para hacerte de productos no perecederos como detergentes, champús, latas, legumbres… Intenta siempre que sea productos que usas, no piques en algo que sabes que no vas a usar por muy barato que lo veas.
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Ahora que la gasolina está como está, piensa antes de coger el coche, si puedes ir andando a la comprar, o a visitar a algún amigo de la zona. No solo por la gasolina de trayecto, sino la que gastas al aparcar si vives en una zona concurrida.
Guarda todos los tickets de las compras mensuales e intenta analizarlos para ver que gastos son superfluos y cuales no, al mes siguiente evita todos los que puedas.
Cuando vayas a comprar con los niños, llévalos recién comidos para evitar que se les antoje todo lo dulce del super, y por si acaso, come algo tú también, es difícil decir no al chocolate.
Estos son algunos de los nuestros… Comparte los tuyo con nosotros también.