El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid concluía recientemente con la firma de un convenio de colaboración ahora refrendado entre el Ministerio de Fomento, el propio Ejecutivo regional y el Ayuntamiento de Coslada para la rehabilitación de un total de 345 inmuebles en las áreas del barrio de la Estación y el casco. En total, la inversión asciende a 4,2 millones de euros. El proyecto, enmarcado dentro del Programa de Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas (ARRUR), ha dado como fruto la formalización del mismo entre el consejero de Vivienda y Administración Local del Ejecutivo regional, David Pérez, y el alcalde de Coslada, Ángel Viveros.
En materia presupuestaria, subrayar que el desglose total de la iniciativa quedaría dibujado de la siguiente manera: el Ministerio de Fomento aportará 1,5 millones y la Comunidad de Madrid 176.285 euros; por otra parte, el Ayuntamiento de Coslada dedicará 291.270 euros y los particulares casi 2,3 millones de euros.
El consejero de Vivienda y Administración local en comparecencia/ Comunidad de Madrid
Un total de 21 barrios de 23 municipios de la región verán rehabilitadas sus viviendas, calles y urbanización a través del Programa de Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas
El acuerdo tiene como fin la financiación de la realización conjunta de obras de rehabilitación en edificios y viviendas, incluidas las unifamiliares, de urbanización o reurbanización de los espacios públicos y, en su caso, de edificación de edificios o viviendas en sustitución de edificios o viviendas demolidos. Las actuaciones programadas tienen por objeto la solución integral de cimentación perimetral y la del interior, para resolver los problemas existentes de movimientos entre los edificios, las grietas y fisuras producidas.
Además, se realizará la sustitución de la red de canalones y bajantes exteriores y de la red horizontal de saneamiento hasta la acometida al pozo general para resolver los problemas de saneamiento horizontal, derivados del mal estado de los entronques, arquetas y pozos; la adecuación al Reglamento electrotécnico para baja tensión y a la normativa de protección contra incendios en los edificios; la instalación de ascensores y rampas salva escaleras, así como la sustitución de carpinterías y acristalamientos para el mejor aislamiento térmico.