Actualmente no es necesaria prescripción médica para solicitar una PCR que detecte si padecemos y/o hemos pasado la COVID-19. Cualquier persona puede acudir a un hospital o un laboratorio que los ofrezca. Respecto a este tema, el laboratorio que la realice está obligado a informar de los casos positivos que pudieran aparecer a la Dirección General de Salud Pública.
En el caso de optar por realizarnos un test otra duda que debemos consultar con nuestro médico es la de qué prueba elegimos: test PCR, estudio serológico o test rápido.
Actualmente el uso de test rápidos está en decadencia debido a su baja fiabilidad, por lo tanto, se recomienda optar por los otros dos y elegir en función a las últimas opiniones médicas que recomiendan lo siguiente:
El test PCR tiene prioridad para personas mayores con morbilidad y con sospecha de infección por COVID19. También se recomienda para adultos que tengan que viajar y convivir con grupos de riesgo.
Por otro lado, si se han padecido síntomas compatibles y han pasado más de 15 días desde su inicio, la prueba más recomendable es la serológica. Esta prueba también debe realizarse en pacientes que hayan tenido contacto con la enfermedad y posiblemente la hayan pasado de forma asintomática.
Método molecular basado en la detección del ARN del virus SARS-CoV-2 por RT-PCR. En la actualidad es la técnica de referencia para el diagnóstico del virus SARS-CoV-2 en las primeras fases de la enfermedad. La detección molecular del virus SARS-CoV-2 es muy específica, por lo tanto, un positivo confirma la detección del virus. Un resultado negativo no siempre significa ausencia del virus ya que depende de la carga viral de la muestra. Si se obtiene un resultado negativo de un paciente con alta sospecha de infección por el coronavirus, se deberá confirmar con una nueva prueba. La toma de muestra es nasofaríngea y no es necesario acudir en ayunas.