El bullying es uno de los grandes problemas que existen, actualmente, en el entorno de colegios e institutos. Un problema que se debe atajar cuanto antes, tendiendo la mano a las víctimas y cortándolo de raíz. Por ese motivo, la psicóloga Beatriz Ramos nos cuenta algunas de las señalas de alarma que tenemos que tener en cuenta para detectar un caso de bullying entre nuestros hijos.
- CAMBIOS DE HUMOR REPENTINOS: En muchas ocasiones encontramos que los cambios de humor repentinos son la primera señal de alarma ante un posible acoso escolar. Los niños se muestran tristes, sin ganas de hacer cosas, sin ganas de contarnos que tal el cole o qué han hecho en él, irritables e irascibles, más callados…
- RENDIMIENTO ESCOLAR: Otra de las señales de que algo puedo no estar yendo bien es el empeoramiento del rendimiento escolar. Esto puede reflejarse en: dificultades de concentración, falta de atención, peores notas, o, incluso, llamadas de atención por parte de los profesores respecto a su actitud en clase.
- NO QUERER IR A CLASE: Hay que tener cuidado con la aparición de excusas para no ir a clase, o no querer participar en actividades escolares. Puede indicar que el niño no se encuentra cómodo en el ambiente escolar. Es importante preguntarle si ocurre algo que motive no querer acudir.
- SÍNTOMAS FÍSICOS: Pueden aparecer diversas quejas sobre dolores físicos, como por ejemplo: dolor de cabeza, dolor de estómago, dificultades de respiración, menor apetito, dificultades en el sueño…
- AISLAMIENTO: El niño tiende a aislarse en su entorno, no solo dentro sino también fuera de clase. Puede mostrarse más callado, más reservado y menos comunicativo.