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Trucos para un bronceado casero
Gracias a varias técnicas de autobronceado conseguirás lucir un color natural … ¡Sin quemaduras de por medio
Estilo de Vida |

Llega el verano y, para los que tenemos la piel muy blanca, esta época puede suponer una bendición o una maldición. Vemos cómo mucha gente comienza a broncearse con los primeros rayos del sol veraniego, sin embargo, nosotros seguimos igual de pálidos y sin mucha esperanza de cambios, pero, ¿queréis conseguir ese look moreno y dejar de tener el “blanco nuclear” de siempre? ¡Atentos a estos trucos!

En primer lugar, cabe recordar algunos aspectos relacionados con el cuidado de la piel y los riesgos que puede acarrear el sol en ella, sobre todo en pieles claras. Sé que queremos lucir ese bronceado, pero no debemos dejar de lado la salud y el cuidado corporal. Así, varios expertos afirman que, en esta época del año, es muy común recurrir a las largas horas postrados al sol, sin embargo, los riesgos que ello conlleva son muy elevados: quemaduras, rojeces, manchas en la piel… Consecuencias que pueden conducirte a desarrollar enfermedades como el cáncer de piel, daños oculares… Por lo que hay que tener mucho cuidado, y no tomar esta opción como el primer recurso para conseguir nuestro moreno.

Cómo broncearnos

Entonces, ¿qué hacemos? En primer lugar, quiero recordar la siguiente frase hecha, “ni tanto ni tan calvo”, es decir, podemos tomar el sol, pero sin pasarnos, cuidando la hidratación de la piel, y echándonos crema solar (un tópico muy típico). Pero también podemos usar unos productos que cada vez cobran más relevancia en el mundo de los bronceados: los autobronceadores.

Autobronceado sin sol

Si bien es cierto que son muchos los productos que se anuncian de este tipo y que, en la mayoría de los casos, no funcionan, hay una serie de técnicas que permiten potenciar su eficacia. Así, podemos elegir entre los bronceadores sin sol y los bronceadores con sol. Si elegimos la primera opción, podremos conseguir un moreno natural sin necesidad de la luz solar, ¿cómo? Sencillo, siguiendo los siguientes pasos:

  1. El primer paso y, quizá, el más importante, es escoger el bronceado adecuado a nuestra piel. Si tienes la piel muy blanca es mejor que escojas los más claros, sino podrás obtener un efecto demasiado artificial, y eso a lo mejor no es tan… bonito.
  2. Una vez que hayas escogido tu bronceador ideal, tu compañero de viaje hacia el moreno deseado, debes exfoliar tu piel. El exceso de piel muerta hace que no solo parezcamos más blancos (si es posible), sino que dificulta que el bronceador pueda hacer efecto.
  3. En tercer lugar, debes aplicar el producto en tu piel evitando las zonas próximas a tus ojos, la nariz y la boca. Si ves que el bronceador puede decolorarte las manos, usa guantes. Es muy importante cubrir bien todas las zonas, por lo que te recomiendo que vayas parte por parte, aunque te tome un tiempo.
  4. Deja que el producto se seque. Espera alrededor de 10 minutos para vestirte y seis o siete horas si te vas a bañar.
  5. Minimiza la exposición al sol nada más haberte aplicado el producto. Los bronceadores potentes suelen llevar una sustancia: la DHA, que fomenta la aparición de reacciones negativas a la luz solar, por lo que hay que tener cuidado.
  6. Repite este proceso día a día, y verás como el color de tu piel va tornándose más oscuro, llegando a lucir un color natural e ideal para el verano

Autobronceado con sol

Si por el contrario prefieres los bronceadores al sol, los pasos a seguir son los siguientes, teniendo en cuenta que deberás escoger un producto que, al contrario que el anterior, no tenga mucha DHA para minimizar los riesgos. Así:

  1. En primer lugar, escoge el bronceador que más se adecue a ti y a tu piel. Además, combina este producto con una crema solar, que permita tener mayor protección sin dejar de lado la posibilidad de coger color. Bien sabemos los “blancos nucleares” que la combinación de crema solar de 50 y sol no son compatibles para coger moreno, por lo que puedes combinarla con el bronceador para potenciarlo.
  2. Aplícate el bronceador en varias sesiones cortas durante varias semanas. Comienza primero por aplicarlo durante unos 15 minutos, y ve aumentando el tiempo a medida que pasan los días.
  3. Una vez apliques el producto y te eches al sol, el tiempo idóneo para que el cuerpo genere melanina y no corras ningún riesgo es de 30 minutos, más podría dañar tu piel. Con 30 minutos ya empezamos a producir esta melanina necesaria para coger color.
  4. Combina estos productos con la alimentación, hay algunas comidas que fomentan la producción de vitamina A, C y E, como por ejemplo: las zanahorias, la calabaza, la escarola…

Tipos de bronceadores

Y, ¿qué bronceadores podemos usar? A mi juicio, uno de los más eficaces es el de Nivea: Nivea Sun bronceador con zanahoria. Como hemos mencionado, la zanahoria tiene vitamina A, que ayuda al bronceado de la piel.

Otros productos que podemos usar y se ajuste al bolsillo son:

  • El de Piz Buin: Tan & Protect Protección Solar Intensificadora en Spray
  • El de Australian Gold: Protector Solar con Bronceador SPF 30
  • El de Babaria: Aceite Protector Monoi Tahiti
  • El de Mercadona, Solcare, muy rico en vitamina E

Aunque hay gran variedad de bronceadores disponibles en el mercado, por lo que encontrar el producto ideal no será el problema. El hándicap llegará en el momento de usarlo, hay que seguir bien los pasos, con una continuidad diaria, para poder ver los efectos deseados en nuestra piel y poder decir “¡Me he puesto moreno/a!”