El Centro de Primera Acogida de Menores Migrantes No Acompañados abierto por la Comunidad de Madrid en La Cantueña de Fuenlabrada sigue siendo objeto de enfrentamiento político y de acusaciones cruzadas entre PSOE, PP y Vox a nivel local y a nivel regional.
Hace unos días se aprobaba en el Congreso el Real Decreto que obliga a las Comunidades Autónomas a aceptar a menores provenientes de los centros de Canarias y la Comunidad de Madrid tendrá que ocuparse, según estimaciones iniciales, de varios centenares más de chicos y chicas. Por ello, el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso ha anunciado la ampliación del centro de La Cantueña donde ya hay alrededor de 100 migrantes. Incluso amenazó el Gobierno regional de mandar a todos los que obliga el Gobierno Central a acoger a Fuenlabrada lo que supuso las protestas del Ayuntamiento fuenlabreño. Después han matizado y han dicho que se abrirán otros centros en otros puntos de la Comunidad.
Toda esta polémica ha llegado otra vez al pleno de Fuenlabrada del mes de abril en el que el PSOE presentó una moción mostrando el rechazo a este modelo de integración que, dicen, va en contra de las recomendaciones internacionales sobre la atención que precisan estos menores.
Así, el pleno mostró su rechazo a la decisión de la Comunidad de Madrid de ampliar el macrocentro. En una moción aprobada con los votos a favor de PSOE y Mas Madrid y en contra PP y Vox, Fuenlabrada vuelve a mostrar su rechazo al modelo elegido por la Comunidad de Madrid para atender a estos menores, instalarlos en un “macrocentro, aislado y masificado que traslada a Fuenlabrada la situación de centros masificados que vive Canarias en estos momentos”, señala el texto.
Por último, insta y exige al Gobierno Regional a que “ponga en marcha una mesa de diálogo junto con los ayuntamientos de la región con el objetivo de establecer los criterios para la atención de estos menores, criterios de solidaridad y de atención integral a los mismos”.
El Ayuntamiento ha expresado ya en otras dos mociones aprobadas en pleno su oposición al modelo de centro elegido que hace imposible el cumplimiento de los principios de igualdad, equidad, no discriminación y solidaridad exigibles.