Los servicios técnicos municipales ha iniciado la supervisión de los 9.800 árboles ubicados en las comunidades de vecinos de la ciudad para podarlos, mantenerlos o sustituirlos en caso de grave deterioro.
Los trabajos se incluyen dentro del Plan de Renovación de Arbolado de la ciudad que se ha puesto en marcha y se prolongará durante los próximos meses. "En las supervisiones periódicas que realizamos hemos detectado ejemplares deteriorados -baja vitalidad, inclinaciones acusadas, pudriciones, excesiva altura lo que supone riesgo de caída, etc-, lo que hace necesaria una actuación para corregir esas deficiencias", señala el concejal de Parques y Jardines, Antonio González Moldes.
A estos problemas de deterioro hay que sumar las plagas y enfermedades que afectan a determinadas especies debilitando el ejemplar y ocasionando graves e irreparables daños. Entre las especies que generan más problemas están los chopos, olmos, sauces, árbol del paraíso o frondosas de crecimiento rápido.
Se llevarán a cabo labores de sustitución, poda y mantenimiento de los árboles
Dentro de este Plan, también se incluye la eliminación de tocones -parte del tronco que queda unida a la raíz al cortarlo-, la reparación de la pradera afectada y la inmediata reposición del árbol por ejemplares jóvenes de crecimiento lento.
El edil ha destacado que, una vez finalice esta campaña, "el número total de árboles se incrementará, nunca se reducirá. Con estas actuaciones queremos que el arbolado de la ciudad cumpla sus funciones ambientales, sociales y económicas y, por otro lado ofrecer seguridad y evitar riesgos, como la caída de ramas que puedan provocar accidentes", concluye.