El párroco Javier Sánchez González y el Colegio Carlos Cano recibieron en el día de ayer la placa con la rama de olivo, símbolo y galardón de los Premios Concordia, un acto que tuvo lugar en la tarde de ayer en el Teatro Nuria Espert a partir de las 18 horas.
Este galardón es entregado por la Junta de Distrito de Loranca-Nuevo Versalles-Parque Miraflores por la labor realizada en defensa de los derechos fundamentales y por el entendimiento y la convivencia.
Este año, el párroco Javier Sánchez González y el colegio Carlos Cano han sido los galardonados. Éstos han recibido a manos del regidor fuenlabreño, Manuel Robles, y de la presidenta de la Junta, Carmen Seco, la placa con la rama de olivo, emblema de la ciudad, que simboliza a Fuenlabrada como ciudad de paz.
Este año el ganador de la modalidad individual es Francisco Javier Sánchez, vecino de Fuenlabrada y fundador de la Iglesia Sagrada Familia de Loranca y capellán de la cárcel de Navalcarnero. Francisco Javier Sánchez es “querido en el barrio por su cercanía y humildad y por la importante labor social que realiza con todos los que lo necesitan”, explica Carmen Seco.
El párroco, cesado hace unos meses por el obispo de Getafe, sigue siendo muy querido y un referente en el barrio de Loranca, tanto por su labor como por su firme compromiso para con la defensa de los derechos.
Por su parte, el Colegio Carlos Cano consiguió el galardón en la modalidad por su especial implicación con la comunidad educativa y el trabajo que lleva a cabo en la transmisión de valores como la igualdad, el trabajo en equipo, la empatía, etc.