Podemos lo tiene claro: una buena fórmula para proteger a las víctimas de violencia sexual durante el ocio nocturno podría ser implantar en la ciudad el protocolo "No callamos".
Por desgracia, la formación morada ha cogido el ejemplo del reciente caso de Dani Alves, por el cual la víctima recibió protección y atención inmediata en la discoteca de Barcelona donde ocurrieron los hechos.
El protocolo se basa en una relación estrecha de cooperación y coordinación entre lugares de ocio nocturno y bares y el Ayuntamiento.
Mediante la fórmula del convenio de colaboración, el Consistorio ofrece a las y los trabajadores de la noche formación de prevención de violencia machista y formación específica para saber cómo actuar en caso de activarse el protocolo.
Prevenir, informar, detectar y proteger es crucial para evitar las violencias
La activación del protocolo se da cuando se detecta un caso de violencia sexual en el local de ocio nocturno. En ese momento, la persona que recibe el aviso contacta con la seguridad del local y se activan dos líneas de actuación.
La primera es ayudar y acompañar a la víctima, ofreciéndole ayuda para abandonar el local y se le informa de los servicios municipales a disposición para ayudarle en el proceso de denuncia.
La segunda línea de actuación es identificar al agresor para poder hacer la denuncia y pedirle que abandone el local. En caso de que este no quiera abandonar, la seguridad del local dará un aviso a la policía local.
Para que las mujeres conozcan que el local está adherido a este mecanismo de protección, se informará de ello colocando carteles tanto el baño de hombres como de mujeres, dónde se informa de la existencia del protocolo y cómo activarlo.
Alba Leo, candidata de Podemos, ha defendido que “este tipo de protocolos, como otras actuaciones similares que hemos puesto en marcha en Getafe, han demostrado ser muy eficaces para acompañar a la víctima y darle todo el asesoramiento necesario para que denuncie en esos momentos tan difíciles".
###75384##