A pesar del aviso amarillo por lluvias y tormentas avanzado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), nada hacía presagiar la magnitud del caos que horas más tarde se desataría. Entre las localidades más afectadas por el temporal, aquellas ubicadas en el este y sur de la región. En un primer momento, los Bomberos apenas registraron leves conatos de incendios debidos a los rayos; sin embargo, el temporal únicamente acababa de comenzar.
En Getafe se vivieron situaciones complicadas debido a las fuertes tormentas acompañadas de granizo que desembocaron en importantes inundaciones y la creación de numerosas balsas de agua. Los cuerpos y fuerzas de seguridad, acompañados por los Bomberos y Protección Civil y en coordinación con las autoridades, atendieron numerosas incidencias a lo largo del día y abogaban por “extremar la precaución” y “evitar los traslados innecesarios” debido al estado de las carreteras. Tras los estragos, la alcaldesa, Sara Hernández, ha agradecido "la labor de Policía Local; Bomberos; Protección Civil; así como de los trabajadores de LYMA y Mantenimiento y empresas colaboradoras que volcaron todos sus esfuerzos hasta restablecer la seguridad en el municipio".
Miembros de Protección Civil durante las labores de mantenimiento/ Ayto. Getafe.
Sin heridos
Según informaba el consistorio local, diversos tramos de vías fueron cortadas en Getafe como consecuencia de las balsas de agua: la carretera del cementerio o el acceso a Los Molinos desde Getafe Norte, como ejemplos. También se formaron balsas en el acceso al Hospital, la M-406 y el acceso de la A-4 hacia el polígono Los Gavilanes. La Policía Local de Getafe registró una treintena de intervenciones; de los cuales alrededor de 25 fueron tipificados como "avisos de menor entidad" referidos a entrada de agua en garajes particulares y colectivos, así como n alguna vivienda debido al atasco de canalones.
El Centro de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid gestionó durante horas numerosos avisos; por su parte, los Bomberos trabajaban sin descanso en achicar balsas de agua de la vía pública e inundaciones de garajes. No obstante, pese a haber recibido “bastantes” avisos relacionados con la tormenta, no ha habido ningún herido en relación a sus efectos. Hoy, con la calma que sucede a la tormenta, "se han intensificado las tareas de limpieza para la vuelta a la normalidad de la ciudad", concluían desde el ayuntamiento.