El hecho de que se vaya a construir una planta de generación de biometano a partir de biorresiduos en el municipio de Cubas de la Sagra, en una zona muy próxima a Torrejón de la Calzada afecta de lleno a la Mancomunidad de Servicios del Suroeste. La parcela en la que se construirá está más cerca de las viviendas de Torrejón de la Calzada que las propias de Cubas. Es por eso que la Mancomunidad, encabezada por su presidente, y también alcalde de Griñón, José María Porras Agenjo ha emitido un comunicado en el que se oponen a su construcción.
En el comunicado han declarado por unanimidad su postura contraria a la futura construcción de esta planta de tratamiento de residuos, y ha contado con el respaldo de Carlos Alañón Olmedo, alcalde de Batres; el ya citado regidor de Griñón; Arantxa Alonso Godino, alcaldesa de Moraleja de Enmedio; Iván Fernández Heras, primer edil de Serranillos del Valle; David Blázquez Baos, alcalde de Torrejón de la Calzada; y Esteban Bravo Fernández, regidor de Torrejón de Velasco. En la declaración han asegurado que “nuestro pilar fundamental es defender unos mejores servicios públicos y una mayor calidad de vida para nuestros vecinos, no pudiendo permanecer inmóviles ante sucesos que puedan afectar directamente a alguno de nuestros miembros”, haciendo referencia a que Torrejón de la Calzada sería uno de los más perjudicados con la ejecución del proyecto.
Por último, se han comprometido “a ejercer cuantas acciones de hecho y derecho estén en nuestra mano” con el objetivo de defender los intereses de sus vecinos, utilizando todas las herramientas técnicas, administrativas y jurídicas para salvaguardar la calidad de vida de la zona.