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Se ha hablado mucho sobre el proyecto de presupuestos 2022 del PSOE y C’s, con el apoyo de Leganemos. Unos presupuestos muy criticables, pero no solo nos podemos quedar en la crítica. Tenemos que dar una alternativa, y demostrar que hay otra forma de gobernar, que es la que nosotras proponemos.

¿Y cuál sería esa alternativa?. Pues una alternativa política centrada en los intereses de las vecinas y vecinos, y no en las grandes multinacionales de los diversos sectores productivos.

Para armar está alternativa, lo primero es que los presupuestos tienen que estar dotados de crédito en el capítulo I (plantilla municipal), al menos suficiente para mantener la plantilla y con el objetivo de aumentarla. De esta forma se puede municipalizar servicios, porque habrá personal que trabaje en ello. Ese crédito además debe ir acompañado de una oferta de empleo público importante, similar a la que el gobierno del Estado va a convocar para 2023 que contempla casi 45.000 nuevas plazas de empleo público. Por ahí pasa la principal vía de solución de los problemas que tiene este Ayuntamiento.

Lo segundo es que como consecuencia de potenciar el capítulo 1, se debe ir reduciendo el gasto del capítulo 2. Que es cierto que incluye gasto corriente, pero también privatizaciones, a las que eufemísticamente se refieren como trabajos de otras empresas o gestión indirecta. Si se aumenta la plantilla, si tenemos más personal, tenemos que subcontratar menos. Además ahorramos, porque es evidente que los servicios que se dan directamente, no solo funcionan mejor, es que además salen más baratos. Y lo hacen por una cuestión evidente, no tenemos que generar ese beneficio que se lleva la empresa. Lo generamos, pero revierte en los servicios municipales.

Lo tercero es que hay que aumentar, o al menos mantener las inversiones. En 2021 lo hacían en su presupuesto, pero fue un espejismo. Presupuestaron cosas que luego no ejecutaron. Y para este presupuesto ya lo desechan, las inversiones bajan de 45,9 millones a 31,7 millones en inversiones directas y de 4,2 millones a 3,4 millones en inversiones de las empresas municipales. Evidentemente esto es en parte debido a que cerraron LG Medios, una empresa cuya utilidad nosotras hemos defendido y a cuyo cierre nos hemos opuesto.

En cuarto lugar, el gasto del capítulo de Gastos Financieros disminuye en 800.000 euros, que son el anticipo de amortización de deuda. Algo que, bajo nuestro punto de vista, es una decisión desacertada. Sobre todo porque ante las incertidumbres económicas, lo correcto es disponer de crédito y no devolverlo a los bancos.

En definitiva, nuestra alternativa a estos presupuestos se basa en tres ejes vertebradores principales:

• Aumentar la plantilla municipal para mejorar los servicios, dejar de privatizar y municipalizar los contratos que vayan venciendo. Mientras tanto, realizar seguimiento de los pliegos y asegurar su cumplimiento. Y si no se cumplen, tomar las medidas que permiten los contratos
• Fomentar la creación de empleo local con un plan que fomente la creación del mismo, teniendo en cuenta las limitaciones a nivel municipal, pero poniendo recursos en ello.
• Mejorar las infraestructuras de los barrios, remodelando y actualizando las de los barrios más antiguos y potenciando la inversión en los barrios más nuevos en los que apenas hay servicios.

Es perfectamente viable, y se puede acometer con un presupuesto de 190 millones de euros. Pero para ello hay que tener una voluntad política que a este gobierno le falta, y que esperamos que de cara a 2023 estemos en condiciones de poner estas propuestas encima de la mesa, y hacer que se cumpla nuestra agenda

Oscar García
Portavoz adjunto del grupo municipal Unidas Podemos Izquierda Unida

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