La Agrupación Deportiva Ibérica LGTBI+ y la Asociación Deporte y Diversidad reclaman en el Día Internacional de la Visibilidad Trans el derecho de deportistas trans a participar libremente en la categoría según su identidad de género sentido y sin tener que aportar ninguna documentación médica. En noviembre de 2021, el Comité Olímpico Internacional aprobó un nuevo marco de ‘equidad, inclusión y no discriminación frente a la identidad de género y las variaciones sexuales’. El máximo organismo regulador del deporte eliminó la normativa de 2015 basada en los niveles de testosterona en sangre y emitió un decálogo de recomendaciones para las federaciones internacionales.
El COI pide que se acabe con la exclusión directa y sistemática de atletas por su identidad de género, su apariencia física o sus variaciones sexuales. Indica que la expulsión de la competición debe estar justificada y sostenida en pruebas e investigaciones sólidas, y sólo cuando la ventaja competitiva sea consistente, injusta y desproporcionada. A pesar de este marco, el presidente de ADI LGTBI+, Víctor Granado, denuncia que “la realidad es que las deportistas trans siguen siendo excluidas en el deporte”, y su participación depende de decisiones arbitrarias de cada una de las federaciones deportivas. Aquellas que consiguen alcanzar la competición profesional “son consideradas tramposas, están sufriendo constantes insultos, se difunden sus datos médicos personales y son sometidas a juicios públicos en los medios de comunicación”.
La lucha trans esta en todos los ámbitos, incluido el deporte de competición
El propio Comité Olímpico Internacional ha señalado la importancia de promover y defender la inclusión y no discriminación de las personas trans, “especialmente en el deporte recreativo y de base”. Una petición histórica de ADI LGTBI+ y Deporte y Diversidad, que insisten en que la regulación del deporte de élite o profesional no debe trasladarse al resto del deporte, el que practica la mayor parte de la población. Para estas entidades, ese deporte base o de categorías inferiores tendría que apostar por “la salud, la inclusión y el desarrollo personal” como objetivos principales.
En cuanto a la aprobación definitiva de la ‘Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI’, insisten en la necesidad de ampliar el ‘Artículo 25’ dedicado al deporte, la actividad física y la educación deportiva, para que se incluya la condena de los actos LGTBIfóbicos en estatutos, códigos éticos y declaraciones públicas de clubes, agrupaciones y federaciones deportivas. El anteproyecto de ley tampoco regula ni protege la práctica deportiva de las personas trans e intersex, ni siquiera en el deporte base. Esta regulación tampoco se ha incluido en la nueva Ley del Deporte, actualmente en tramitación en el Congreso de los Diputados.
ADI LGTBI+ y Deporte y Diversidad denuncian el retraso y las prórrogas injustificadas en la tramitación de la modificación de la Ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, para que incluya la homofobia, la bifobia y la transfobia. ADI LGTBI+ y Deporte y Diversidad han insistido en la importancia de que las diferentes Comunidades Autónomas españolas con leyes específicas LGTBI aprueben los reglamentos y normativas necesarias, que garanticen los derechos de las personas trans en todos los ámbitos, incluído el deporte. Además, han hecho un llamamiento a las federaciones autonómicas en España para que faciliten las fichas federativas a las personas trans según su identidad de género sentido, tal y como señalan estas leyes.
Las entidades que representan a los clubes LGTBI inclusivos del territorio nacional han recordado que en las CC.AA. sin leyes específicas para el colectivo, ya hay un importante antecedente judicial. El Tribunal Administrativo del Deporte ordenó en julio de 2019 a la Federación de Patinaje de Castilla y León la expedición de la licencia deportiva en categoría de sexo sentido a un deportista trans.
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