Ayer por la mañana se hizo pública la resolución del caso de la boda del expresidente de Coca-Cola Marcos de Quinto, en la que tres trabajadores de Coca-Cola se manifestaron. La jueza del juzgado de lo penal número 1 de Cuenca no ha interpretado ningún tipo de injuria o amenaza por parte de los manifestantes, lo cual contrasta con la declaración de Marcos de Quinto a la hora de testificar para poner la denuncia.
La jueza encargada del caso ha absuelto de cualquier responsabilidad penal a los tres manifestantes al no entender ningún delito de coacciones, ni de injurias, ni contra los sentimientos religiosos. Y es cierto que los manifestantes elevaron el tono de la protesta, pero tras que se reformase el pasado 30 de marzo la LO 1/15, se ha derogado las penas por ofensas leves al honor de las personas.
Los gritos de los manifestantes han sido considerados fruto del conflicto laboral existente, no injurias o amenazas
Manifestación autorizada
En definitiva, no se considera que haya habido uso de violencia o intimidación por parte de los 3 acusados, por lo que los novios pudieron celebrar la boda con total libertad. Esto choca con las acusaciones de Marcos de Quinto que se pronunció "acosaron a los invitados". El caso quedará sobresellado por el momento, y los manifestantes absueltos por no pasar a las amenazas, y respetar en todo momento los límites impuestos por los agentes para la manifestación autorizada.