Sí. Es oficial. En 2021 (se ve lejano, pero no), diremos definitivamente adiós a los bastoncillos, platos y cubiertos, vasos y pajitas de plástico de un solo uso. El Parlamento y el Consejo Europeo han llegado a un acuerdo político para su prohibición con el fin de luchar contra la contaminación por plásticos.
Así que, esta nueva directiva, cuyo texto se votará en la Comisión de Medio Ambiente durante el primer trimestre de 2019, no solo prohibirá su venta, si no también obligará a los fabricantes de determinados productos de plástico, como toallitas húmedas o cigarrillos con filtros, informen en el etiquetado sobre el impacto negativo medioambiental que generan cuando son abandonados en el entorno.
Es curioso el caso de Baleares. Esta Comunidad Autónoma ya se planteó aprobar una ley de Residuos para prohibir en 2020 (un año antes de la entrada en vigor de esta nueva directiva) la venta de productos de plástico de un solo uso: las cápsulas de café de un solo uso fabricadas con materiales difícilmente reciclables, las vajillas de usar y tirar, las pajitas para bebidas, bastoncillos para los oídos y los bastoncillos para caramelos podrían comercializarse solo si están hechos con materiales compostables.