España se encuentra en Estado de Alarma decretado por el Gobierno de la nación debido a la pandemia por coronavirus (COVID-19). Una situación que restringe la libre circulación de las personas (salvo supuestos imprescindibles como hacer la compra o acudir a trabajar si no se puede optar por el teletrabajo) y que obliga a la ciudadanía a guardar medidas de seguridad como lo son la distancia prudente, el menor contacto físico posible y unas pautas de higiene básicas, como el lavado de manos constante.
Una serie de directrices que en uno de los servicios por los que pasa la mayor parte de la población, el Metro, no se cumplen. La ironía de un Estado de Alarma en el que los usuarios del mencionado transporte no pueden, aunque quieran, separarse a siquiera un metro de distancia hace que la crispación aumente conforme pasan los días.
"Cuarentena eterna si seguimos así", reza una de las denuncias que se pueden encontrar a través de las redes sociales, Instagram, en este caso, que están siendo utilizadas como altavoz para quejarse de la situación que viven, cada día, aquellos que deben seguir utilizando, por fuerza mayor, este medio de desplazamiento.
Las instantáneas colgadas en redes sociales permiten comprobar los nulos protocolos de seguridad aplicados
Vagones abarrotados, la misma afluencia de trenes de siempre y un malestar generalizado son los componentes de lo que se puede encontrar, cada día, en el Metro de Madrid. La misma cuenta de Instagram colgaba, este viernes, numerosas fotografías en las que se podía apreciar el escaso mecanismo preventivo de seguridad que evita la propagación y el contagio de COVID-19.
Las instantáneas, correspondientes a este 20 de marzo, entorno a las 15:00 horas en la Línea 6, tal y como ha podido contrastar Soyde., permiten comprobar los nulos protocolos de seguridad aplicados. "Cada vez veo más gente en el metro" o "distancia de seguridad nula" son algunas de las afirmaciones del ciudadano que lo denuncia.
Pese a que Metro de Madrid anunciase la semana pasada que iba a intensificar sus labores de desinfección en el suburbano, los usuarios no se muestran conformes. De nada sirve, entienden, unas labores de desinfección de los vagones si, después, "se llenan de gente sin ninguna medida de protección". La cuarentena, previsiblemente, se alargará hasta después de Semana Santa para evitar desplazamientos masivos, pero, si la situación continúa así, el tiempo puede ser indeterminado.