Fuentes del área de Movilidad de Madrid, confirmaron las fechas después de que el propio delegado las revelara durante su participación en las jornadas de Medio Ambiente de Madridiario.
El 7 de noviembre (se ha modificado la fecha al 8 de noviembre), el tráfico de la M-30 se desviará y pasará por lo que fue el césped del Estadio Vicente Calderón. Este desvío durará hasta finales de febrero.
Finalmente, el desvío comenzará el viernes 8 de noviembre. Esa noche se demolerá la barrera que actualmente separa los cinco carriles, que circulan en el mismo sentido, y se acondicionarán los desvíos, pavimentando, instalando barreras, conos y la señalización.
Durante el próximo sábado -de 6.00 a 20.00- se podrá circular por los tres carriles izquierdos, al tiempo que continúan los trabajos en otras zonas. En la noche del sábado -a partir de las 20.00- al domingo 9 se realizará el primer desvío por el césped del campo de los dos carriles derechos y se podrá circular también por los tres carriles izquierdos, una fórmula que se mantiene hasta las 23.00 del viernes siguiente, 15 de noviembre. Entonces empezará la última parte de los desvíos. Primero -de las 23.00 del viernes a las 2.00 del sábado- la circulación se desviará a los tres carriles izquierdos de la actual calzada, mientras que los dos nuevos carriles del desvío se ampliarán a tres.
Una vez acometida esta ampliación desde la madrugada del sábado 16 y hasta las 6.00 del domingo se circulará por los tres carriles derechos ampliados del desvío -los que atraviesan el campo- y se volverá a permitir el acceso desde San Epifanio, mientras que los carriles izquierdos se adecuarán. Desde las 6.00 del domingo 17 hasta el mediodía la circulación se desviará a los tres carriles izquierdos, manteniendo el acceso desde San Epifanio, hasta que a partir de ese momento y hasta las 6.00 del lunes 18 se haga el cambio de circulación al desvío definitivo: cinco carriles, los mismos de la actual calzada, que atravesarán el campo. En el desvío que atraviesa el estadio la velocidad se reducirá a los 50 kilómetros por hora.
Según informa EMESA, el desvío consta de cinco carriles, los mismos que tiene la M30 en condiciones normales, con protecciones a ambos lados de la carretera para evitar posibles accidentes. Para el acceso a la maquinaria dedicada al proyecto se ha habilitado un paso inferior a través del cual poder acceder al complejo.
Tan solo queda en pie una de las tribunas, por lo que la demolición del Vicente Calderón cumple con sus fechas y se estima que concluya para finales de febrero de 2020.
La última fase de la demolición supone demoler la grada paralela al río Manzanares, que por su cercanía con la M-30 y dado que la prioridad es la protección y seguridad de toda la zona, antes de la demolición del exterior del estadio se aislará el perímetro, realizando el comentado desvío.
Además, las obras de canalización afectarán también a las calles de los paseos Imperial, Pontones y Melancólicos, donde se cortarán carriles.
En cuanto al itinerario de los camiones, se está haciendo a través de las calles que menos molestan, reduciendo el impacto del paso de los mismos cuando tengan que cargar y descargar material para las obras. Pese a ello, los vecinos no están contentos, y en diciembre hay una reunión prevista entre el área de Obras y Equipamientos, presidida por la delegada Paloma García Romero y las empresas adjudicatarias.