Vecinos de tres bloques de viviendas situados en el madrileño Ensanche de Vallecas han denunciado públicamente que Fidere, la filial del fondo de inversión Blackstone en España, les exige subidas "abusivas" en los precios de los alquileres si quieren renovar su contrato; como consecuencia, anuncian movilizaciones. Según denuncian junto a la PAH y el Sindicato de Inquilinos, la empresa Fidere, que adquirió estas viviendas sociales al Ayuntamiento de Madrid durante la época de Ana Botella, estipula como condición para renovar contratos un aumento de hasta el 80% de la renta.
Este caso representa claramente los efectos del negocio especulativo sobre la vivienda que ha caracterizado la gestión pública del suelo