MENÚ

De deporte para “pijos” a modalidad que practican, actualmente, más de cuatro millones de españoles. El pádel ha conseguido hacerse un hueco en nuestra rutina deportiva por varios motivos. Principalmente, por lo divertido de su juego. Pero, más allá de lo espectacular de cada punto, la gran cantidad de pistas que encontramos cerca de nuestra casa ayuda para que, cada vez, sean más los chicos y chicas que se lanzan a comprar una pala.

Ese fue el caso de María del Mar Vilches, una madrileña apasionada del pádel. Y como la pasión por el deporte se contagia, ella no tardó en trasladarle su afición a su hija, María Arteaga. A pesar de tener, solamente, cinco años, María se inició en el pádel a través del Club Pádel Monte Rozas. Allí, junto a su hermano mayor -al que le tiraba más el fútbol-, fue descubriendo un deporte que la ha llevado a ser, actualmente, la número 1 de la Comunidad de Madrid con tan solo diez años.

Un camino que no ha sido sencillo. Muchos años de entrenamiento y de esfuerzo que, ahora, han dado sus frutos. Pero lo más sorprendente de la historia radica en el tiempo que ha tardado María en convertirse en la mejor jugadora de Madrid. Era marzo de 2019 y la roceña se estrenaba en una competición federada junto a su amiga -y jugadora de tenis- Covadonga Verdejo, gracias al respaldo de su mentor, el profesor Juan Jaudenes. En el torneo, celebrado en Alcobendas, la pareja se llevó la victoria, mostrando el gran potencial de las dos.

Nueva pareja

Pero María Arteaga quería seguir creciendo. En mayo y junio formó pareja junto a la toledana Paula Ferrán, con la que logró dos nuevos campeonatos. Hasta que llegó el Campeonato Absoluto de Madrid Bullpadel de Menores, en el que volvió a coincidir con Covadonga. De allí salieron campeonas, colocándose como la nueva número 1 del ranking de Madrid en categoría benjamín.

Una victoria que confirmó, una vez más, en este pasado mes de diciembre, cuando disputó, junto a Paula Ferrán, el Master de Menores de la Federación Madrileña de Pádel 2019, donde se proclamaron vencedores del torneo, un resultado que sirvió a ambas para acabar el 2019 como las mejores benjamines de la Comunidad de Madrid.

Una gran promesa

Su talento no ha pasado desapercibido para los ‘cazatalentos’ del mundo del pádel. Tanto es así que, la próxima temporada, María formará parte de la Fundación Estrella Damm, una de las mejores escuelas de tecnificación de nuestro país. Allí trabajará para ser, algún día, como alguna de sus referentes, como son Alejandra Salazar, Marta Marrero, Marta Ortega, Ariana Sánchez y las hermanas Sánchez Alayeto.

Pero, por el momento, María Arteaga sigue centrada en unos estudios en los que también destaca. Un tema que preocupa, especialmente, a su padre, Óscar Arteaga, que nos cuenta que “a medida que vaya cursando otros niveles más altos y entrenando más a fondo veremos cómo hacemos para que nunca pierda la perspectiva de su formación académica, que es fundamental para su futuro”.