Antonio Caballero /@DonAntonioCG
“Grazie per tutti. Ci vediamo. Ciao”. Al igual que a los mandos de su bici, Rosalía Ortiz se defiende a las mil maravillas delante del micrófono. Sobre todo, gracias al bagaje que le han dado los últimos años -uno de ellos viviendo en el norte de Italia-. Allí probó el profesionalismo de la mano del Servetto, equipo al que volverá en el año 2020. Se irá en enero, pero mantiene un italiano que fue aprendiendo a marchas forzadas.
Aprovechamos una de sus pocas estancias en Fuenlabrada, ciudad que la vio crecer y convertirse en una de las ciclistas nacionales con más presente y futuro. En enero volará a Italia, donde afrontará la segunda parte de su sueño. Ser profesional es “diferente” a como se lo había imaginado cuando era Junior en España. “Tienes que entrenar, hacer las cosas bien y alimentarte bien. Es muy estricto. Es muy diferente”, nos explica la corredora de 20 años.
Allí compartirá equipo con ciclistas de diversas nacionalidades y representará a España en carreras por medio mundo. “Estamos en auge las féminas”, nos cuenta Rosalía, aunque, cree, que “con la nueva normativa de la UCI han quitado muchas oportunidades a las corredoras españolas para poder acceder a un equipo UCI y se las están dando a gente de fuera”.
Piensa que la mejor solución para eso es formar a las corredoras nacionales y darles oportunidades para que muestren su talento. Ahí surge el nombre de ciclistas como Carolina Vega, Almudena Morales o Carolina Esteban, jóvenes corredoras madrileñas con un futuro brillante por delante.
Para todas ellas, Rosalía es un ejemplo a seguir. Ella está centrada en el deporte. Como nos cuenta su hermana y compañera de viaje Gabriela, “es un poco desastre” en su día a día, pero muy aplicada en sus entrenamientos. Nos visita con su última herida de guerra: un corte en la rodilla durante su último ciclocross. Esperándola en meta estaba toda su familia, incluidos perros y gatos. Una familia que la ha acompañado durante todo este intenso recorrido.
Hace que conozcas un montón de culturas. Lo que conoces, la mentalidad que tienen, lo que piensan realmente, pero que no expresan, es increíble
Sin embargo, hace un par de años se dio cuenta de que, para crecer, necesitaba marcharse lejos. “Estuve en Fuenlabrada, un año increíble. Gané en Francia en mi primer año de Junior. Hice tercera en una Copa de España. Y de ahí, preferí dar el salto a un equipo fuera, porque pensaba que aquí me estaba estancando, no llegaba a ser lo que yo era”. Y ahí fue cuando llegó la llamada de Italia.
Tras un año en el país transalpino, volvió a España, pero, con el paso de los meses, se ha terminado de convencer de que su sitio está fuera de nuestras fronteras. “Ellos me dan la oportunidad otra vez, confían en mí, y yo les agradezco esto, porque que confíen y que hagan un calendario World Tour, con carreras fuera de España, es lo que yo quiero: correr. No quiero estar en mi casa parada, quiero entrenar y correr”, explica Rosalía.
Su primera experiencia la marcó para el resto de su vida. La segunda la afronta con las mismas ganas: “hace que conozcas un montón de culturas. Lo que conoces, la mentalidad que tienen, lo que piensan realmente, pero que no expresan, es increíble. Al final el deporte es esto”.
Rosalía Ortiz tiene todo años por delante para triunfar haciendo lo que más le gusta. Su sueño, está claro: ir convocada con la Selección Española. Todos los sueños se cumplen.