Primero Facebook te informa de que dos de tus amigos nacieron el mismo día que Madonna, luego aprendes el significado de las 40 palabras más bellas del diccionario y de repente las ves por todas partes o aún más allá, las palabras te suenan a colores. ¿Crees que alguien está jugando con las leyes de la naturaleza? Existen fenómenos tan espeluznantes como curiosos, incluso si han sido capaces de ser explicados por la ciencia. Se trata de paradojas y problemas tan interesantes como los que te proponemos a continuación:
La “coincidencia” en las fechas de cumpleaños
¿Tienes conocimientos de estadística? Si es así te sorprendería el resultado que encontrarías al reunir a un grupo de 23 personas y preguntarles sus fechas de nacimiento. Las matemáticas dicen que existen un 50,7% de posibilidades de que al menos 2 de los individuos hayan nacido en el mismo día. Este suceso es una paradoja ya que se trata de un hecho que contradice la intuición a través de una verdad matemática. Y es que, de forma intuitiva pensaríamos que para que ese resultado sea cierto necesitaríamos 183 personas (365 días del año dividido entre dos). Sin embargo, “sorprendentemente” no es así. Por ello de 19 monarcas españoles (desde los Reyes Católicos) han habido coincidencias. Entre ellas Carlos II y Carlos IV (11 de noviembre) y José I con Juan Carlos I (5 de enero) así como otros ejemplos encontrados en equipos de jugadores de fútbol, -tal y como expone el diario ABC en este artículo-. ¿Quieres alucinar aún más? Si reúnes a un grupo de 60 personas las probabilidades aumentan hasta en un 99% o compruébalo tú mismo a través del recordatorio de cumpleaños disponible en Play Store.
Existen fenómenos tan espeluznantes como curiosos, incluso si han sido capaces de ser explicados por la ciencia.
La sensación que nos producen los números, colores y letras
¿Te parece que el número 1 es de color rojo?, ¿un cierto nombre lo imaginas color naranja?, o ¿el sonido ‘Si’ es color violeta? Si esto te ocurre, eres parte de ese 1% de personas capaces de experimentar la sinestesia, es decir, la capacidad de percibir escuchar los colores, ver los aromas y colorear los números, entre otras percepciones visuales y sonoras. Esto se debe a una conexión entre los diferentes sentidos en el mismo momento sensorial que provoca una forma diferente de vivir; esto ha sido experimentado por algunos como Baudelaire, Rimsky-Korsakov o Naboko. Pero la sensación que nos producen los números no se limita a colores, también a buena o mala suerte. Tal cual podemos leer en esta infografía elaborada por Betway Casino, existen ciertos números que aportan más suerte que otros. Pese a no existir pruebas científicas que acrediten veracidad a esta teoría, lo cierto es que el simple hecho de tener confianza un número aporta seguridad al individuo y con ello se incrementa la posibilidad de tener buena suerte. Es el caso de ciertos números como considerados de buena suerte como el 7 y el 12 mientras que otros, no tan afortunados como el número 4 en China y el número 13 en España, son rechazados por la sociedad.
El fenómeno Baader-Meinhof o la sincronización
Desde que pasaste tus vacaciones en Ámsterdam, ¿todos te hablan de la ciudad? No se trata de una conspiración sino del fenómeno Baader-Meinhof. Tal y como explica este artículo elaborado por Gizmodo, la explicación a este suceso está en lo que Carl Jung llamó ‘sincronicidad’ que no es más que la predilección de patrones que desarrolla nuestro cerebro. Así, tal y como indica La Mente es Maravillosa: no existe la casualidad, existe la sincronicidad. esto explica por qué cuando pensaste en llamar a tal persona, fue ella la que te llamó o por qué cuando soñamos con alguien conocido, no tardamos en encontrarnos con dicho individuo. Y es que según Jung, existe el llamado ‘inconsciente colectivo’ por el cual aquello que pensamos tiene un efecto de atracción en el resto de los individuos. Ya lo dijo William James en su cita: “Somos como islas en el mar, separadas de la superficie pero conectadas en la profundidad”. Increíble, ¿verdad?
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Esto no queda aquí, también está el fenómeno Deja Vú, la teoría de ‘el mundo es un pañuelo’ que explica por qué es posible llegar a cualquier persona del mundo conectando a 5 amigos, aquella otra que explica por qué escuchamos a nuestro vecino “jugar a las canicas” por la noche y un sinfín de otras paradojas que -al igual que el nuevo juego de moda, Escape Room- mantienen a nuestra mente entretenida, Y tú, ¿cuál de ellas has experimentado?