José Vicente Siles, ingeniero de Telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), se ha convertido en el primer ingeniero español que consigue el distinguido premio Lew Allen de Excelencia Investigadora que otorga a jóvenes investigadores la NASA. El premio, repartido en honor al directo de la NASA Lew Allen entre los años 1982 y 1990 durante el programa Voyager, se otorga como reconocimiento individual al trabajo de investigación, que tengan como resultado logros sobresalientes innovadores. El trabajo de José Vicente consiste en el diseño e implementación de la nueva generación de receptores de alta resolución espectral en infrarrojo lejano, es decir, la capacidad de poder estudiar no solo las regiones de formación de estrellas, sino también detectar agua y su composición en cometas y otras lunas del Sistema Solar, como Europa Júpiter y Encelado en Saturno. Actualmente Siles es investigador principal de un proyecto para desarrollar “una nueva cámara ‘multi-pixel’ de alta resolución espectral en ‘terahercios’ para estudiar agua y otros elementos en cometas”.
La investigación consiste en la implantación de unos detectores de infrarrojos para detectar agua y la composición de cometas y otras lunas del Sistema Solar
Tras cursar bachillerato en Baeza, se licenció en la Universidad Politécnica de Madrid donde inicio su carrera como investigador en 2002 como becario del departamento de Señales, Sistemas y Radiocomunicaciones. En 2008 se doctoró como Ingeniero de Telecomunicación (cum laude) y Doctor Europeus (2009) por su trabajo en el diseño de circuitos para receptores de alta resolución para radiotelescopios de infrarrojo lejano. Además, colaboró como investigador en la Universidad de Roma Tor Vergata y en el Observatorio Astronómico de París. En 2010 se incorporó al Laboratorio de Propulsión a chorro de la NASA. Actualmente, además, colabora con el National Institute of Health (NIH) de EEUU para aplicar su tecnología a nuevos sistemas médicos.