El Ayuntamiento de Madrid inicia este fin de semana los trabajos previos para comenzar el soterramiento de la A-5. Se centrarán en la demolición de varios inmuebles del paseo de Extremadura expropiados para la obra; en el derribo de la mediana en la autovía para poder trasladar en febrero todo el tráfico a una de las calzadas; se habilitarán los desvíos provisionales mediante ramales y, posteriormente, a mediados de febrero, se operará en la calzada sur que se cerrará al tráfico para su soterramiento.
Mañana sábado, 11 de enero, se van a realizar las obras de demolición de los inmuebles del paseo de Extremadura ubicados en los números 321, 323 y 325. Se trata de construcciones de dos plantas de altura con cubierta inclinada y unas construcciones anexas de menor entidad.
Debido a la cercanía de los inmuebles a la autovía, para hacer la demolición y recoger los restos de las construcciones, desde las 7:00 horas del sábado a las 13:00 horas del domingo, 12 de enero, se van a cortar los dos carriles derechos de la superficie de la carretera, en sentido entrada a Madrid, del punto kilométrico 5+200 al 5+100. El corte afectará a una superficie aproximada de 160 metros e irá desde la incorporación a la A-5 por la calle de los Yébenes hasta el número 319 del paseo.
El lunes, 13 de enero, se llevarán a cabo las actuaciones preliminares en horario nocturno para reducir dos carriles de circulación por sentido en ambas calzadas. La capacidad de la vía quedará reducida a la mitad desde la mañana del miércoles, 15 de enero, del punto kilométrico 3+300 al 6+250.
Desde el miércoles, se mantendrán habilitados para el uso general dos carriles por sentido de circulación en cada una de las calzadas. Posteriormente, en la primera quincena de febrero, se procederá a desviar todo el tráfico a la calzada norte (en sentido salida de Madrid), habilitándose dos carriles por sentido. De este modo, se cerrará por completo la calzada sur (en sentido entrada a Madrid), donde comenzarán las obras de soterramiento, una actuación que se extenderá hasta finales de 2025. Se garantizarán los movimientos de los enlaces existentes durante las distintas fases de obra.
A principios de 2026, se procederá a actuar en la calzada norte y se desviará todo el tráfico a la calzada sur. Del 20 de enero al 1 de febrero de 2025, en horario nocturno, de 23:00 a 6:00 horas, la capacidad del viario en sentido salida se reducirá un 75 % y se mantendrá habilitado para el uso general un carril por sentido de circulación. Durante el día se mantendrán los dos carriles por sentido en la calzada norte. Durante todo este proceso, la velocidad máxima de la vía en la zona de obras pasa de los 70 km/h actuales a 50 km/h.
Estas ocupaciones provocarán, a lo largo de los próximos meses, afecciones al tráfico en la zona, especialmente en el tramo comprendido entre la avenida de Portugal y el entorno de la avenida del Padre Piquer. Por ello, el Ayuntamiento de Madrid, el Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM), la Comunidad de Madrid, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible y el resto de municipios afectados por las obras han coordinado un plan de movilidad para garantizar la mayor fluidez posible en los desplazamientos de los ciudadanos.
Dada la complejidad técnica y de gestión de esta intervención, el plan de movilidad se irá adaptando a cada una de las fases de las obras y sus medidas serán supervisadas y, en su caso, mejoradas de forma continua. Se garantiza que, en los momentos de mayor afección a la movilidad, se mantendrán dos carriles por sentido en la autovía.
El plan de movilidad contempla las siguientes medidas:
Además, se pondrán en marcha dos lanzaderas de EMT Madrid con una frecuencia de paso de aproximadamente cinco minutos:
Se habilita también una línea circular entre Batán y Lucero con tres autobuses y con 960 plazas/hora.
Las líneas alternativas de EMT Madrid al eje de la A-5 son las siguientes:
Respecto a las líneas de autobuses interurbanas, se verán afectadas 28. Diecisiete que tenían su cabecera en Príncipe Pío modificarán su trayectoria para empezar y terminar en Cuatro Vientos, donde los usuarios podrán optar por coger el metro o bien la línea C-5 de Cercanías. Con esta medida, se pretende descongestionar la entrada a Madrid y ofrecer a los usuarios opciones para llegar de una forma más rápida y eficaz a sus destinos.
Las 17 líneas que modifican su itinerario y finalizarán en Cuatro Vientos afectan a los siguientes municipios:
Por otro lado, la línea 573 de Boadilla del Monte mantendrá su cabecera en Moncloa, pero modificará su itinerario por la M-40 y M-500, llegando a su destino sin pasar por Príncipe Pío.
Por otro lado, las líneas 541, 545, 546, 547, 548, 551 que recorren los municipios de Villamanta, Aldea del Fresno, Villa del Prado, Cadalso de los Vidrios, Cenicientos San Martín de Valdeiglesias, Pelayos de la Presa, Navas del Rey y Chapinería alterarán su itinerario y llegarán a plaza Elíptica haciendo parte de su recorrido por la Radial 5, que será gratuita para el transporte público.
Hay dos líneas, la 532 de Sevilla La Nueva y la 510 de Villaviciosa de Odón, que finalizarán su recorrido en Colonia Jardín. La 510A modificará su itinerario dejando de pasar por la Universidad Europea para acortar su recorrido en el tramo Villaviciosa-Alcorcón. Por otro lado, se crea una nueva línea, la 510B (Alcorcón–Villaviciosa de Odón), con la terminal en la Universidad Europea de este municipio.
En cuanto a las líneas nocturnas, no sufrirán modificaciones de itinerario, manteniendo su cabecera en la glorieta de San Vicente, en Madrid (N501, N502, N503, N504, N505, N808 y N905).
Además, se dispondrá de ocho autobuses y 16 conductores de reserva para que puedan dar servicio ante cualquier incidencia que pudiera producirse. Por último, el CRTM va a destinar un equipo de 50 personas para controlar el funcionamiento del sistema de transporte desde los diferentes centros de control: el CITRAM, Cercanías, Metro y EMT Madrid, así como para dar apoyo en las estaciones de la zona afectada y a pie de calle.
En lo que afecta a la movilidad exterior en el ámbito en el que se van a ejecutar los trabajos de soterramiento y construcción del Paseo Verde del Suroeste (tráfico de paso A-5/M-30), los principales itinerarios alternativos que contempla el plan de movilidad son los siguientes:
Respecto a la movilidad interior en el ámbito en el que se desarrollarán los trabajos (tráfico a nivel de barrio), se establece que las vías alternativas principales serán:
La mejor ruta alternativa para vehículos con destino a la zona del Zoológico procedentes de M-30 será el desvío por paseo de Extremadura, llegando hasta el final de la avenida de Portugal para tomar la carretera del Parque de Atracciones hasta finalizar en destino.
Para aquellos vehículos que se dirijan a la zona del zoológico procedentes del oeste de la A-5, se aconseja el desvío por avenida de los Poblados, llegando hasta el final de la calle Valmojado para tomar la calle de los Yébenes hasta finalizar en destino. Para alcanzar la avenida de los Poblados desde la A-5, el desvío se realiza por la calle de Villadiego.
Para los destinos a la avenida de la Aviación y la zona de Pirámides/Marqués de Vadillo, se recomienda tomar las calles del General Ricardos, Eugenia de Montijo y Joaquín Turina. Las mejores rutas alternativas para vehículos que viajen entre la calle de los Yébenes y el Puente de San Isidro, serán las calles de la Duquesa de Parcent, avenida de Nuestra Señora de Valvanera, calle Vía Carpetana y paseo de la Ermita del Santo.
Para aquellos viajes con destino entre la avenida de los Poblados y el Puente de Segovia, serán las calles de Valmojado, del Concejal Francisco José Jiménez Martín y de Caramuel. Se recomienda a los ciudadanos que planifiquen previamente el viaje que mejor se adapte a sus necesidades, evitando la zona, y que elijan el transporte público para los desplazamientos.
Para facilitar la movilidad en el exterior del ámbito, se va a reforzar la señalización en las vías de alta capacidad del entorno de la A-5. Esto permitirá al usuario del vehículo privado acceder a dichas rutas de una forma más sencilla y con información que le permita la elección de la ruta más idónea en función de su destino. Se trata de puntos considerados ‘de decisión’ para los conductores y en los que contarán con la señalización de las obras e información sobre los cortes. El refuerzo de la señalización se realizará en estos puntos y se irá mejorando o aumentando en función de las necesidades que se detecten:
Se aprovechará, además, toda la señalización variable existente en estas vías para reforzar la información ofrecida a los conductores, manteniendo una coordinación constante entre la señalización correspondiente a las diferentes administraciones que gestionan estos viales.
De forma previa a la puesta en servicio de cada una de las fases de las obras, se realizará una monitorización de aforos que arrojará una imagen real del flujo de tráfico en obras. Este análisis, obtenido mediante el modelo de microsimulación, permitirá adoptar las mejores soluciones en cada momento y realizar ajustes y optimizaciones de los desvíos planteados. Se prevé, también, el empleo de datos de tráfico de Floating Car Data–FCD procedentes de TomTom y de diversas fuentes como OEM (equipos de navegación en vehículos de fábrica), dispositivos de navegación embarcados, datos GPS de aplicaciones móviles o dispositivos telemáticos, entre otros.
Con la ejecución del Paseo Verde del Suroeste y el inherente soterramiento de la A-5, el Ayuntamiento de Madrid recuperará para los vecinos el espacio ocupado en la actualidad por la autovía que separa los barrios de Lucero, Aluche y Las Águilas, que han estado separados de los de Campamento y Casa de Campo (este último perteneciente al distrito de Moncloa-Aravaca). Actualmente, por la A-5 circulan diariamente 80.000 vehículos. La obra, una vez finalizada, reducirá en un 90 % los vehículos en superficie y las emisiones contaminantes.
En superficie, la cubrición de la A-5 permitirá dar continuidad al bulevar peatonalizado de la avenida de Portugal hasta la avenida del Padre Piquer en una actuación que comprende un total de 3,2 kilómetros. Se priorizará la movilidad peatonal y ciclista, dejando una vialidad dimensionada para atender los recorridos locales del vehículo privado y el transporte público urbano.
Bajo tierra, el nuevo túnel tendrá una distribución de tres carriles por sentido en dos vanos. Los carriles más próximos a la mediana en ambas calzadas se diseñan para su uso como carriles bus-VAO, dotados con una señalización variable que permitirá regular su utilización en función de las necesidades del tráfico en cada momento. La flexibilidad de este sistema permitirá la optimización de la infraestructura, adaptándose a la demanda de transporte de manera variable.