La Fundación ONCE Perro Guía es la encargada de criar, cuidar y entrenar a los futuros perros guías, además cuenta con un albergue para perros jubilados. Cada año, más de 140 nuevos perros salen de la Fundación listos para ayudar, pero antes necesitan de una familia que los adopte y los eduque.
Si tienes disponibilidad para desplazarte a la sede de la Fundación ubicada en Boadilla del Monte, y te comprometes a que el perro no esté solo más de dos horas al día, puedes ser una de las personas seleccionadas para cuidar estos futuros guías. Siempre tendrás apoyo y asesoramiento de un supervisor, únicamente tienes que dedicar tiempo y cariño.
Los animales, que suelen ser de raza labrador retriever, Golden retriever, pastor alemán y flat coated retriever, crecen en la Escuela de la Fundación Once Perro Guía junto a sus madres y cuidadores.
Al cumplir dos meses, los cachorros son acogidos por familias educadoras seleccionadas por la Fundación. Durante ese periodo el perro aprende a convivir con personas próximas y extrañas, y a acostumbrarse a situaciones, objetos y sonidos de la calle. La familia ejerce el papel de la socialización.
Cuando el perro tiene 14 meses vuelve a la Escuela y comienza su adiestramiento, basado en órdenes comunes y más específicas como señalar bordillos o sortear obstáculos. Tras el proceso de adiestramiento, el animal ya está preparado para guiar a su dueño en situaciones complejas.
El último paso es asignar el perro guía a una persona ciega, teniendo en cuenta las necesidades, habilidades y entorno del usuario y las características del animal. Pero antes de comenzar su vida diaria, el perro y su futuro dueño reciben un curso para aprender a trabajar juntos.