El sexo ha sido y es un tema difícil de tratar en muchas culturas, ya que desde hace varios siglos su concepción y disfrute han estado condicionados por diversas construcciones sociales. Sin embargo, actualmente sabemos que antiguas civilizaciones tenían costumbres más liberales que hoy se pueden considerar raras, pero que han inspirado nuevas y revolucionarias ideas eróticas.
Desde los dildos de oro de Cleopatra, hasta la creencia errada de Joseph Mortimer Granville al inventar el primer vibrador para curar “la histeria femenina” en 1870, los seres humanos han tenido una necesidad latente de conocer y explorar su sexualidad. Hoy en día, este debate está más presente que nunca y la oferta en objetos con temática sexual ha alcanzado una popularidad inconmensurable.
Contrario a lo que se cree, los primeros objetos usados para el acto sexual datan de hace más de 30.000 años. Son dildos fabricados en roca pulida de 20 cm de largo encontrados en viejos yacimientos arqueológicos. Además, algunos de estos dildos tenían curvas y relieves que los hacían bastante similares a los penes humanos, pero que también se les daban otros usos como encender fuego.
Con el paso del tiempo y los avances de la civilización, se fueron creando nuevos objetos con materiales más adecuados para estar en contacto con los genitales femeninos (y según varios historiadores, también con el ano). Sin embargo, la difusión e imposición de la religiones abrahámicas tuvo un impacto negativo en el uso de estos primitivos objetos sexuales, ya que estas religiones tenían preceptos bien estrictos con respecto al sexo y a la castidad.
Esto permite entender que el uso de juguetes sexuales no es algo exclusivo de la actualidad, sino que ha estado presente en la sexualidad humana desde los primeros vestigios de la civilización. Hoy en día es común encontrar enormes vallas publicitarias y comerciales de tv de tiendas online especializadas en este tipo productos. De hecho, puedes encontrar alternativas muy creativas sin tener que gastar mucho dinero. Verás muy buenas opciones en páginas como https://pinkcabaret.es/.
Uno de los más transgresores es, sin duda alguna, el “succionador de clítoris” inventado por Michael Lenke en 2014: el Satisfyer.
Otro factor fundamental que ha ayudado a normalizar el uso de los juguetes sexuales, es la reivindicación del placer sexual femenino y el empoderamiento de la mujer. En la antigüedad, mujeres poderosas como Cleopatra eran conocidas por el uso de juguetes de oro o aceites esenciales usados como lubricantes en el acto sexual. En efecto, la conocida faraona usaba un rollo de papiro con abejas en su interior para introducirlo en su vagina.
Incluso en el Renacimiento las primeras tiendas eróticas tenían toda clase de dildos, pero que eran de tamaños demasiado grandes que se cree que eran para satisfacer un morbo masculino (ver cómo las mujeres los usaban). Para entonces, la sexualidad femenina ya estaba sometida a las reglas de religiones patriarcales y misóginas que veían el placer sexual de la mujer como acto inmoral y pecaminoso.
Mucho tiempo tuvo que pasar para que las olas del feminismo empezaran a revelarse contra estas imposiciones culturales. Además, la lucha por la igualdad y los derechos de las comunidades oprimidas (clase obrera, personas racializadas, personas LBGTQ+, hippies) puso sobre la mesa que el placer sexual es parte vital de la naturaleza e identidad humana, es diverso y le pertenece única y exclusivamente a los individuos; cuestionando directamente las concepciones machistas, restrictivas y retrógradas.
Tal ha sido la revolución sexual que desde inicios del siglo XXI se ha incrementado la visibilidad de estos temas en medios de comunicación y en distintos tipos de formatos culturales. Al mismo tiempo, se ha diversificado la fabricación de todo tipo de juguetes sexuales. Uno de los más transgresores es, sin duda alguna, el “succionador de clítoris” inventado por Michael Lenke en 2014: el Satisfyer.
Este elemento de placer ahora está disponible en diferentes marcas, colores, tamaños, e incluso viene con todo tipo de funciones. Está pensado para que las mujeres tengan un orgasmo seguro y puedan conocer mucho mejor su cuerpo en la intimidad. Además, lo usan mujeres de todas las edades, solteras, casadas, y con todo tipo de estilo de vida.
Por otra parte, en las tiendas eróticas online se pueden encontrar productos y juguetes para todos los gustos (unos de invención más reciente, y otros que ya tienen mucho tiempo en el anonimato). Algunas de las alternativas más populares son:
Este gran abanico de opciones ahora está al alcance de personas solteras o en pareja, heterosexuales y sexodiversas, de 20 años o de 60; ofreciendo formas de placer y descubrimiento que nadie debería dejar pasar. Hoy en día, estos juguetes sexuales son la representación tangible de largos años de lucha y conquistas que hoy permiten disfrutar el sexo como nunca antes pudo la humanidad.