La red de Metro de Madrid es una de las mejores de Europa. Actualmente transporta a millones de viajeros y es una de las piezas claves del transporte público en Madrid.
El suburbano madrileño cuenta con 12 líneas que comunican a 302 estaciones. El total de extensión se estima en unos 300 kilómetros de longitud, convirtiéndola en la tercera red más larga de Europa.
Este año Metro cumple 100 años, mucho tiempo, en el que se ha desarrollado la infraestructura exitosamente, pero también ha habido errores, como el caso del amianto, o el de la línea 7, entre otros.
Todo se remonta a la legislatura de 2003-2007, cuando las prisas de la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, por inaugurar el trazado llevaron a errores en su ejecución que continúan siendo un problema que se ha llevado ya 25 millones de euros.
El 5 de mayo de 2007, Esperanza Aguirre, Ignacio González y Alberto Ruiz-Gallardón acudieron a la inauguración del tramo. Fue conocida como la ampliación del Metro Este, 7B o la línea del Wanda. En esta nueva fase se sumaban ocho nuevas estaciones entre Las Musas y Hospital de Henares. La inversión rondaba los 645 millones de euros y se puso en funcionamiento a 22 días de las elecciones autonómicas, según cita Global News.
El plan principal era que el proyecto uniera con un tramo recto las estaciones de San Fernando y Jarama, pero en última instancia se decidió que trazara una curva para unir también el recorrido Henares y el Hospital de Henares.
En esta última decisión no se tuvo en cuenta la geología del terreno. Existen filtraciones de aguas en la zona que afectan a la capa de tierra que sostiene al túnel provocando que “quede suspendido” y existan riesgos de descarrilamiento.
Para evitar los descarrilamientos y percances, cada poco tiempo se deben acometer obras para recubrir la capa inferior disuelta con sales y yesos disueltos.
De los tres tramos, entre Coslada y San Fernando de Henares es el que más problemas ha dado. Este costó 315 millones de euros, a los que hay que sumar casi 25 millones en obras de reparación. Desde la inauguración de la línea 7B en 2007, se registraron 595 incidencias solo por avería de tren.
Ha habido que realizar reparaciones en 2008, 2010, 2012, 2013, 2014 y 2015 por importes entre 7 y 10 millones de euros.
Actualmente el tramo está abierto, pero las soluciones al parecer no serán definitivas.